miércoles, 15 de diciembre de 2010

Iglesias adjudicó irregularmente un contrato de 41 millones



07:13 (15-12-2010) | La Gaceta

El servicio de ambulancias de Aragón fue otorgado por un órgano sin competencias. Se realizaron pagos sin ninguna justificación.

M. L. Alonso. Madrid

El informe del Tribunal de Cuentas revela innumerables anomalías contables cometidas por el Gobierno presidido por el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias. Una de las más llamativas, que según el órgano fiscalizador ya ha hecho llegar a la Fiscalía para su estudio, es la que se refiere a la adjudicación de la gestión del servicio público de transporte sanitario urgente de pacientes de Aragón.

Según consta en el informe del Tribunal, el director de la gerencia de Urgencias y Emergencias Sanitarias del 061 de Aragón contrató “sin tener competencias para ello” el servicio de ambulancias en 2004. A pesar de ello, el Gobierno regional del socialista Marcelino Iglesias decidió dar el visto bueno a esa contratación y “se aprobó el gasto sin la previa fiscalización del mismo por la Intervención General, como hubiera sido preceptivo por su cuantía”, según advierte el Tribunal de Cuentas.

Así las cosas, después de que se adjudicara irregularmente –pues quien dio la concesión no tenía poder para hacerlo–, el Gobierno autonómico aprobó el gasto millonario mediante un acuerdo firmado por la reunión del Ejecutivo el 11 de mayo de 2004. Finalmente, el contrato se formalizó con un precio de 41.030.400 euros y un plazo de ejecución del servicio de cuatro años. Sólo siete meses después, el 16 de diciembre de 2004, el Gobierno de Iglesias decidió romper ese pacto de mutuo acuerdo con la empresa adjudicataria del servicio de ambulancias.

Esa decisión supuso el pago de 750.000 euros a la compañía y ningún beneficio para los usuarios aragoneses. O lo que es lo mismo, el Gobierno autonómico tomó una decisión a través de un procedimiento erróneo, a los pocos meses dio marcha atrás y encima su ineficacia costó dinero a los contribuyentes aragoneses. Para romper ese acuerdo, el Ejecutivo de Iglesias apeló al aumento del precio del combustible y los costes salariales, pero, según asegura el Tribunal de Cuentas, no existe ninguna documentación que sustente esa decisión.

Sentencia

Pero la polémica por las adjudicaciones del servicio de ambulancias en Aragón no se queda ahí. Después de romper ese contrato millonario, el Ejecutivo socialista abrió otro proceso de concesión por más de 45 millones de euros. En este caso, según el Tribunal de Cuentas se realizaron pagos al nuevo adjudicatario durante el año 2005 “sin certificación sobre la integridad de su contenido”. “No se describen” los conceptos de los pagos y en algunas facturas, incluso, la única referencia existente es la palabra “pedido”, “sin mayor explicación”, afirma el órgano fiscalizador.

Además de esta denuncia del Tribunal de Cuentas, sobre esa concesión pesa una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Aragón.
El tribunal autonómico emitió un fallo contra el nuevo contrato de ambulancias en 2009, por el que se anuló la nueva adjudicación de la gestión del servicio público de transporte sanitario realizada en 2005. De este modo, de nuevo, otra empresa debía ser indemnizada por una mala decisión del Ejecutivo del actual secretario de Organización del PSOE.

Da la casualidad de que, además, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Aragón anulara esa concesión de 2005, este año el Gobierno autonómico ha otorgado de nuevo esa concesión a la misma empresa, Ambuibérica. La nueva concesión fue publicada el pasado 16 de noviembre en el Boletín Oficial de Aragón a pesar de que una sentencia anuló una concesión anterior basándose en que la adjudicación había sido irregular.
Según el TSJ autonómico, el Gobierno de Marcelino Iglesias modificó las condiciones de la adjudicación en mitad del proceso y, además, a pesar de que no cumplía con las características del concurso público, la empresa Ambuibérica recibió la máxima puntuación y, por tanto, la concesión.


1 comentario:

  1. Este cuatrero, aparte de gastarse el dinero de los aragoneses en sus caprichos, antes de irse nos mete el catalán,claro, como el es charnengo no es nada estraño. Pues, si es irregular lo que a hecho según el tribunal de cuentas, que reponga lo que a gastado.

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