
Los proetarras la emprendieron a pedradas y botellazos contra los agentes, a los que también insultaron. Finalmente no consiguieron evitar la detención.
  Mientras Aurore Martin sigue paseándose impunemente  por Bayona tras su arresto frustrado, un incidente similar, pero con  otro desenlace, ha tenido lugar en nuestro país, en Vitoria. Allí, un  hombre y una mujer han sido detenidos por la Ertzaintza acusados de  enfrentarse a agentes de la Policía autonómica para evitar un arresto,  ha informado el departamento vasco de Interior.
 
 Los hechos, informa Efe, se han producido pasadas las 7:45 horas cuando  una dotación de la Ertzaintza se encontraba en la calle Sefarad del  barrio de Judizmendi de la capital alavesa, que se encuentra en fiestas,  para proteger a los servicios de limpieza durante las labores de retirada de pancartas y lavado de pintadas en favor de los presos de ETA y de la organización juvenil de la banda, Segi.
 
 En un momento dado, un joven se ha aproximado a una furgoneta policial y  ha pintado en ella la frase ‘Gora ETA militarra’ (Arriba ETA militar),  por lo que tras una breve persecución ha sido detenido por los  ertzainas, acusado de un delito de enaltecimiento del terrorismo.
 
 Sin embargo, cuando los policías se disponían a conducir al arrestado,  un joven de 24 años con antecedentes de terrorismo callejera, a  dependencias policiales se han presentado en el lugar unos cuarenta proetarras que han rodeado la furgoneta y han intentado impedir el traslado del detenido mediante empujones al vehículo e insultos a los ertzainas.
 
 Además, han comenzado a lanzar piedras, botellas y objetos  a otros ertzainas que han acudido al lugar para ofrecer apoyo a sus  compañeros atacados, por lo que finalmente los policías han realizado  una carga para disolverlos y han detenido a dos de ellos: una joven de  22 años y un menor de 17, este último con antecedentes por terrorismo  callejero, a los que se les imputa un delito de atentado contra agentes  de la autoridad.
 
Caña a los batusis, que se creen que todo el monte es orégano.
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