07:35 (04-03-2011) | La Gaceta
Las Fuerzas de Seguridad sitúan la célula ‘durmiente’ en Navarra. Los etarras detenidos en Vizcaya reconocen que mataron a Puelles y Conde. La banda responde con ‘kale borroka’ a los arrestos.
Alberto Lardiés. Madrid
Pese a la desarticulación del comando Vizcaya, ETA todavía dispone de capacidad para asesinar. Fuentes de la lucha antiterrorista aseguran a LA GACETA que la banda criminal dispone de al menos otro grupo dispuesto para perpetrar atentados cuando los jefes etarras así lo decidan. Se trata de otro comando durmiente asentado en Navarra.
Los agentes de la lucha antiterrorista sospechan que se trata de una célula de etarras legales (no fichados por las Fuerzas de Seguridad). De ahí la enorme dificultad para encontrarlos, seguirlos y apresarlos. Igualmente, las citadas fuentes no descartan que ETA también tenga otros grupúsculos repartidos por las tres provincias vascas.
Algunos de ellos serían viejos grupos que atentaron años atrás y después quedaron descolgados. Y es que uno de los fenómenos más repetidos en la banda asesina en los últimos años es que los comandos queden desconectados de la dirección etarra cuando se detiene al jefe que les daba las órdenes. Esto ocurre precisamente porque los terroristas cada vez mantienen menos contactos entre ellos para evitar, como hacen las células de Al Qaeda, las detenciones en cadena.
Por otro lado, los etarras del comando Vizcaya detenidos el pasado martes en Bilbao ya han reconocido haber cometido una docena de atentados, entre ellos algunos de los crímenes que les imputaban los investigadores de la Guardia Civil. Como ya informó este diario, estos presuntos terroristas son responsables de los asesinatos del brigada del Ejército Luis Conde –22 de septiembre de 2008, en Santoña– y del policía nacional Eduardo Puelles –19 de junio de 2009, en Arrigorriaga–. Asimismo, perpetraron un intento de masacre al atentar contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Burgos, el 29 de julio de 2009.
Conforme al testimonio de uno de los arrestados, los ataques habrían corrido a cargo de Daniel Pastor, Iñigo Zapirain y Beatriz Etxeberria, con lo que la otra detenida, Lorena López, no habría tenido una participación directa.
Las fuentes de la investigación consultadas destacan el valor de desvelar el siniestro pasado de este grupo de etarras, pero remarcan la importancia de conocer sus planes para el futuro. En ese sentido, insisten en que los terroristas tenían perfectamente trazado el plan para asesinar a un miembro de la Benemérita en breve, como desveló ayer este diario. Un ataque preparado por el sector más duro de la banda criminal con la intención de dinamitar la última tregua-trampa, declarada el 10 de enero.
Fruto de sus pesquisas y de las declaraciones de los etarras, los investigadores confirman ya que los terroristas tenían información sobre futuros objetivos, entre ellos de miembros de la Ertzaintza –como también se publicó en estas páginas– y de jueces. Además, esa información estaba “actualizada”.
Esta recua de asesinos afincados en Bilbao se autodenominó como comando Otazua en recuerdo a Arkaitz Otazua, según reveló Europa Press. El sujeto citado era un presunto terrorista que murió en 2003 al atentar contra la Ertzaintza. Asimismo, ya se sabe que fue la etarra Saoia Sánchez, hoy encarcelada y acusada del asesinato de dos guardias civiles en Capbreton, quien les reclutó en 2006.
Como era de esperar, ETA ha respondido a los arrestos a través de sus cachorros, que anteanoche reavivaron la kale borroka con dos ataques en Vitoria. Los proetarras empezaron con un ataque a una sucursal bancaria con tornillos, tuercas y pintura negra. Unas horas más tarde, de madrugada, tres borrokas quemaron neumáticos en la calle Reyes de Navarra. Una dotación de bomberos se tuvo que desplazar hasta la zona para apagar el incendio.
Son como las setas, se cortan y vuelven a nacer. Hay que asfixiarlos hasta morir.
ResponderEliminar