domingo, 23 de octubre de 2011

ETA no pedirá perdón y exigirá al Estado que reconozca haber causado “víctimas”



  • 23-10-2011 | La gaceta

    La banda “sólo hará un reconocimiento de los perjudicados civiles por su lucha”, según sostiene en sus documentos. Su ‘brazo político’ habla de “reparación” a los que han sufrido “las múltiples violencias”.

  • Alberto Lardiés. Madrid

    ETA carece de cualquier atisbo de intención de pedir perdón por los crímenes que ha perpetrado. Lo dejó claro en su comunicado del pasado jueves. Y así lo arguyen las fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por este diario. Sin embargo, los terroristas sí pretenden que el Estado reconozca públicamente que ha causado víctimas con el “uso de formas violentas”. Dentro de su hoja de ruta de la negociación que pretenden articular con el Gobierno que salga de las urnas el 20-N, los encapuchados tienen previsto reclamar a sus interlocutores que “reconozcan las víctimas creadas por el Estado”.

    Además, como escriben en su lenguaje retórico y pomposo, los etarras pretenden que el Ejecutivo con el que negocien también reconozca haber utilizado “formas violentas”, entre las que citan la “tortura”, los “GAL” o la “cárcel”. 50 años y casi 900 víctimas después, aún consideran que existe una guerra con dos bandos iguales.

    Estas premisas de los etarras son una constante en la documentación interna que ha ido siendo intervenida por las Fuerzas de Seguridad. Así, por ejemplo, en el documento ProDem (abreviatura de proceso democrático), considerado por los agentes de la lucha antiterrorista como el plan más determinante diseñado por los asesinos en los últimos años, se incluye este párrafo: “ETA no pedirá perdón por sus acciones, sólo hará un reconocimiento de las víctimas civiles derivadas por su lucha”. “Al Estado le pedirá –agrega– el reconocimiento de las víctimas creadas por él y el uso de las formas violentas. El reconocimiento o resarcimiento moral y político de la lucha en Euskal Herria vendrá en el Marco Democrático”.

    Los miembros de ETA no se arrepienten y, por consiguiente, tampoco consideran que deban disculparse ante sus víctimas. Así de rotundo es el diagnóstico que hacen desde la lucha antiterrorista. Y para ejemplificarlo mencionan, sin ir más lejos, el último comunicado de los terroristas. Junto al celebrado “cese definitivo de la actividad armada”, los terroristas incluían que “la lucha de largos años ha creado esta oportunidad”. Y a continuación enviaban su “reconocimiento y más sentido homenaje” a los etarras fallecidos, presos o exiliados (huidos de la Justicia).

    El brazo político de la banda criminal comparte esa visión surrealista de que existe un “conflicto político” que ha causado bajas a ambos contendientes de una supuesta “guerra” entre iguales, y no víctimas del terror. Por ejemplo, en el Acuerdo de Guernica, auspiciado por Batasuna en septiembre de 2010, firmado con otras organizaciones políticas vascas y considerado como la hoja de ruta de los batasunos, se habla de la “necesidad de un reconocimiento, reconciliación y reparación de todas las víctimas, originadas por el conflicto político y la realidad de las múltiples violencias”.

    Y es que, como adelantó LA GACETA, a pesar de que ETA se niega a admitir su naturaleza terrorista y a pedir perdón, su brazo político ultima ahora mismo un documento acerca de “todas las víctimas del conflicto”. Por supuesto, los batasunos equiparan a las 900 víctimas de ETA con las 27 de los GAL. Y sitúan todas esas muertes, como la banda, en el marco de una supuesta “confrontación armada”.

    “Compromiso”

    Fuentes de la lucha antiterrorista comentan que este documento puede ser el primero en que Batasuna muestre su “compromiso” con el “reconocimiento” del “sufrimiento” de todas las víctimas causadas por sus propios correligionarios. El texto, no obstante, aún está en proceso de elaboración, siempre según estas fuentes. Su publicación será antes de las elecciones del 20 de noviembre, lo que apunta a que los batasunos también tienen intereses electorales que explotar con este movimiento.

    La rama política de la banda está injerta en la coalición Amaiur, junto a formaciones democráticas como Eusko Alkartasuna, Alternatiba y Aralar. Las encuestas apuntan a que esta alianza obtendrá un gran resultado en las elecciones generales. Incluso, puede conseguir cinco o más escaños, lo que le permitiría tener grupo propio en el Congreso de los Diputados.

1 comentario:

  1. Estos al final, se nos mean en la gorra. Todo por la bajada de calzones de este desgobierno, que no piensa nada más que en la poltrona.
    Lo dicho, hay que engrasar la chata, por si acaso...

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