MANUEL MARRACO / Madrid
16/07/2011/El Mundo
El lunes será un día clave para la investigación que podría devolver a prisión al ex número 1 de ETA Iñaki de Rentería. Para ese día, el juez Santiago Pedraz ha citado al etarra Jesús María Uribecheberría, miembro del comando que mantuvo secuestrado a Ortega Lara.
El terrorista es uno de las dos patas que sustentan la implicación de Ignacio de Gracia Arregi en el secuestro. Y la más débil. La primera y más sólida es que dos periciales grafológicas de la Policía y la Guardia Civil sostienen que fue él quien escribió de su mano un documento incautado a ETA firmado por Gorosti.
La segunda es que Uribecheberría dijo tras su arresto que había sido Gorosti quien ordenó al comando Gohierri prolongar el secuestro, pese al terrible estado de salud de Ortega Lara. Esas declaraciones fueron prestadas ante la Guardia Civil, pero no ratificadas ante el juez, lo que les restaría buena parte de su valor probatorio. Habrá que ver si casi 15 años después de su detención, Uribecheberría va a incriminar a Gorosti.
Fuentes jurídicas indicaron ayer que el magistrado tiene previsto esperar hasta que concluya la declaración para resolver los recursos de reforma interpuestos por la Fiscalía y las acusaciones populares contra su decisión del pasado miércoles de dejar en libertad provisional a Iñaki de Rentería. Una decisión que Pedraz adoptó cuando ya contaba con la declaración policial de Uribecheberría y con uno de los dos informes grafológicos. Por el momento, el juez ha descartado acordar las medidas de vigilancia sobre Rentería reclamadas por el fiscal
J. M. ALONSO / San Sebastián
16/07/2011
Lizarza coloca a su manera la bandera española
El Ayuntamiento de Lizarza ha cumplido a su manera con la obligación de colocar la bandera española. Ni está colocada en el balcón del Consistorio ni cuenta con las medidas oficiales. Así, ha silenciado la enseña nacional al dotarla del menor tamaño posible y al reservarla un sitio poco visible.
La minúscula bandera ondea ahora junto a la ikurriña y la enseña del pueblo, de idénticos tamaños, desde una pequeña ventana situada en lo más alto del Consistorio, en la pared que corresponde a la puerta de acceso al Ayuntamiento. Bildu cumple de este modo con la legalidad cuando el plazo de un mes concedido por el Gobierno para colocar la insignia está a punto de expirar.
El subdelegado del Ejecutivo central en Euskadi, Mikel Cabieces, había remitido una carta al Consistorio en el que le instaba a restaurar la bandera española colocada por la anterior alcaldesa, Regina Otaola (PP), y que fue sustituida por una pancarta a favor del acercamiento de los presos de ETA.
El Ayuntamiento se ha agarrado a la inconcreción de la normativa para relegar la bandera a un segundo plano, ya que la ley sólo dispone que la enseña de España «deberá ondear en el exterior» del Consistorio, sin especificar el lugar. El reglamento tan sólo apunta al interior y establece que la enseña debe ocupar «el lugar preferente» dentro de «todos los edificios y los establecimientos de la Administración central, autonómica, provincial o insular y municipal del Estado».
Vaya lo bien que van los etarras en los juicios, ya quisiera cualquier persona estos privilegios. Es más rentable ser terrorista en este pais, que ciudadano normal, aparentemete asi es.
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