J. M. ALONSO / Lizarza (Guipúzcoa)
05/07/2011/El Mundo
Nada más tomar posesión de su cargo, el Gobierno de Bildu en Lizarza eliminó de forma inmediata la bandera española que ondeaba en el balcón del Ayuntamiento y que había sido colocada por la anterior alcaldesa, Regina Otaola (PP). Ahora, casi un mes después, la enseña nacional podría ser enterrada para siempre en este histórico bastión abertzale.
La corporación municipal ha convocado este jueves a los vecinos a una «asamblea popular» para debatir si obedece o no el requerimiento oficial realizado por carta por el delegado del Gobierno, Mikel Cabieces, para que la bandera española ondee en el balcón del Ayuntamiento.
Lo primero que hizo la izquierda abertzale al acceder al poder en Lizarza fue ejecutar lo que había estado aguardando durante cuatro años. Entre los vítores de los vecinos, los integrantes del nuevo Gobierno municipal retiraron la enseña nacional y la sustituyeron por la pancarta que reivindica la vuelta de los presos de ETA al País Vasco, que desde entonces preside el Consistorio junto a la ikurriña.
Los vecinos de este bastión abertzale de poco más de 640 habitantes decidirán el futuro de la bandera, después de que la corporación municipal liderada por Aitor Agirre haya dejado en sus manos la decisión de cumplir el requerimiento de la Delegación del Gobierno, en cumplimiento de la Ley de Banderas.
La disyuntiva es clara, y así se recoge en un bando emitido por el Gobierno municipal y que está colocado en el panel de información del Ayuntamiento y en otros puntos del municipio. El texto, escrito prácticamente en su integridad en euskara, es elocuente:
«El Gobierno español ofrece el siguiente requerimiento al Ayuntamiento de Lizarza:
- 'La bandera deberá ondear en el exterior y ocupar el lugar preferente en el interior de todos los ayuntamientos [sólo esta parte aparece en castellano]'.
- Existen dos opciones:
- Desobedecer la ley. Nos echarán del Ayuntamiento.
- Obedecer la ley. Estaremos obligados a poner la bandera española».
Los vecinos decidirán en una asamblea este jueves a las 19.00 horas si el Consistorio se declara insumiso y se expone al correspondiente castigo legal o, por el contrario, se da marcha atrás en la medida adoptada hace ahora un mes y se coloca de nuevo la bandera española.
Junto al bando llamando a la reunión se exhibe una copia de la comunicación que el delegado del Gobierno ha remitido al alcalde, fechada el pasado 17 de junio (seis días después de la constitución del nuevo Ayuntamiento), en la que le emplaza a que en un mes restaure la bandera española para que vuelva a ondear junto a la ikurriña.
Al tener «conocimiento» de que el Consistorio «ha procedido a retirar de la fachada de su sede la bandera de España», Mikel Cabieces advierte de que «no da cumplimiento» a lo previsto en la Ley 39/1981, «que regula el uso de la bandera nacional y el de otras banderas y enseñas». Ésta, según explica, dispone que la de España «deberá ondear en el exterior y ocupar el lugar preferente en el interior de todos los edificios y establecimientos de la Administración central, institucional, autonómica, provincial o insular y municipal del Estado».
En concreto, recuerda que el artículo 4 indica que «en las comunidades autónomas cuyo Estatuto reconozca una bandera propia, la enseña se utilizará conjuntamente con la bandera de España en todos los edificios públicos civiles del ámbito territorial de aquella». Por ello, y de conformidad con lo previsto en el artículo 65 de la Ley 7/1985, reguladora de las Bases de Régimen Local, Cabieces emplaza al alcalde a que «en el plazo de un mes proceda a dar cumplimiento a lo previsto en la citada norma» y restaure en su lugar la bandera española.
La anterior alcaldesa, que tuvo que escuchar amenazas de todos los colores durante su mandato, no pudo ayer evitar una carcajada cuando se le informó de la convocatoria de esta asamblea popular para debatir el futuro de la enseña nacional. El mero hecho de que los mismos que se prestaron a retirar la bandera que ella misma colocó pregunten si deben reponerla en su sitio o desecharla le provoca, cuanto menos, una sonrisa irónica. «La ley es la ley y está para cumplirla», argumenta Regina Otaola.
A la espera de conocer qué decisión adopta el pueblo, el Ayuntamiento permanece con la misma vestimenta de hace un mes, con la ikurriña ondeando en el balcón acompañada de una pancarta reivindicativa del regreso de los presos. A media tarde de ayer, apenas había movimiento en la calle. En la plaza, unos niños desafiaban al calor y jugaban junto a la Casa Consistorial. A los pocos vecinos que se divisaban no parecía gustarles demasiado la presencia de personas forasteras.
La asamblea del jueves llegará casi un mes después de la constitución del Ayuntamiento, acto que estuvo concertado por ediles de ANV, la ilegalizada marca de Batasuna que pudo gobernar en muchos consistorios guipuzcoanos la pasada legislatura. Bildu decidió ceder el protagonismo a quienes no pudieron presentarse a los comicios de 2007 en este municipio.
OORBYT.es
>Vea hoy en EL MUNDO en Orbyt el análisis de Montse Ramírez sobre la vuelta de la 'guerra de las banderas'.
ÁNGELES ESCRIVÁ / Madrid
05/07/2011
Batasuna pretende 'blanquear' el resto de sus organizaciones ilegales
Los dirigentes de Batasuna están intentando poner en orden su universo de organizaciones ilegalizadas y pretenden reestructurar la izquierda abertzale blanqueando las formaciones que la constituyen y que no son ETA. Así pues, al igual que intentan que Sortu se convierta en el referente político que sustituya a Batasuna, su idea incluye la creación de un movimiento juvenil que sustituya a Jarrai-Haika-Segi o la configuración de otro organismo que tome el testigo de las también ilegalizadas Askatasuna o Senideak «a favor de los derechos de los presos».
Las Fuerzas de Seguridad hicieron llegar hace varios meses un informe en este sentido al Gobierno, del mismo modo que informaron de que los líderes de la formación ilegalizada querían que se disolviese Ekin, el aparato de comisarios políticos designado por la banda terrorista para garantizarse el cumplimiento de la ortodoxia por parte de sus propios simpatizantes.
Algunas fuentes señalan que Ekin ya se ha disuelto, pero otras sostienen que los miembros de este brazo de control político de ETA siguen manteniendo reuniones con los responsable de las distintas estructuras de la izquierda abertzale. Si bien todos los expertos coinciden en señalar que tanto la debilidad de la organización terrorista como los continuos golpes contra sus comisarios políticos (que tienen desde hace meses dificultades para comunicarse con sus jefes) han hecho que su operatividad y, por lo tanto, su capacidad de control sobre Batasuna, sea más que relativa.
El paso más importante de la reestructuración planteada por algunos de los dirigentes de la izquierda abertzale sería la legalización de Sortu por parte del Tribunal Constitucional. Pero no es el único. De hecho, en el asunto de la lucha contra la política penitenciaria o a favor de los derechos de los presos de ETA ya no es Senideak la organización que ha estado realizando las últimas manifestaciones y demás convocatorias.
Esa función la está llevando a cabo Egin Dezagun Bidea, que se presenta como una organización de carácter «plural» y «transversal», es decir, que recoge todas las inquietudes procedentes de diferentes partidos, agentes y representaciones sindicales que aspiren a que «la política penitenciaria salga de los ámbitos de la utilización y de la represión para situarse en claves de resolución democrática».
Según las Fuerzas de Seguridad, los dirigentes de la antigua Batasuna pretenden restaurar las estructuras ilegalizadas de la izquierda abertzale, por un lado, pero no descuidan, por otro, las iniciativas que afectan a la denominada «construcción nacional». De hecho, refuerzan el polo soberanista en el que Bildu es la apuesta política e institucional y Eleak la plataforma destinada a defender «los derechos civiles», situándose en contra del juicio del caso Bateragune o apoyando la oposición a la aplicación de la euroorden en casos como el de Aurore Martín, que evitó ser detenida por la policía francesa.
Mientras tanto, ETA continúa desarrollando lo que denomina labores de mantenimiento. Las informaciones sobre cuál es su postura respecto a los movimientos de la izquierda abertzale son diversas.
Sin embargo, los informes policiales más cautos sostiene que, con o sin Ekin, ni por asomo ha dejado la iniciativa política en manos de Batasuna. El último documento interno que recoge su situación es el Zutabe 113, redactado ya hace algunos meses y en el que los dirigentes de la organización reconocen que se encuentran en un proceso de reflexión y debate interno y que todavía no han llegado a ninguna conclusión.
En realidad, según los expertos, la banda se debate entre la utilidad y su verdadera capacidad. Sus dirigentes, ante la crisis operativa más grande de la historia -está por ver cuál es su rédito político total- tienen dudas. Temen que realizar algún atentado en estos momentos pueda generar divisiones pero teme también que no realizar ninguna manifestación de poder le haga perder definitivamente su ascendencia sobre aquellos de los suyos que disfrutan en estos momentos de las instituciones.
MANUEL MARRACO / Madrid
05/07/2011
La separación entre ETA y Bateragune, «un teatrillo»
El comisario, responsable de la investigación de Bateragune, compareció en calidad de testigo-perito para ratificar y explicar los informes que en octubre de 2009 condujeron a la detención de Arnaldo Otegi, Rafael Díez Usabiaga y otros seis acusados. A preguntas del abogado de la asociación Voces contra el Terrorismo, Juan Carlos Rodríguez Segura, el policía afirmó que «los miembros de Bateragune actúan como delegados de ETA». «ETA es la dirección y Bateragune es la codirección, porque colabora, aunque sólo en el plano político, no en el político-militar», añadió.
El perito testigo resumía así lo que había ido desgranando en el interrogatorio previo del fiscal del caso, Vicente González Mota, que reclama 10 años de cárcel para cada acusado. El declarante hilvanó todo el material surgido en los interrogatorios previos, así como el material reunido en sus informes. Desde el primero, en el que aún hablaba de la «composición actual de la Mesa Nacional de Batasuna», hasta el último, en el que ya se había detectado que lo que en realidad estaba funcionando era otra cosa: Bateragune, es decir, «una comisión de dirección superior, única, de la izquierda abertzale en el orden político».
Añadió que, por sus características, era un órgano «mucho más ágil» que la mesa nacional que ellos andaban buscando, y que permitía a ETA transmitir más eficazmente sus decisiones, ya que Bateragune «abarcaba hasta el último rincón de la estructura organizativa de la izquierda abertzale».
La base de la investigación fueron las vigilancias secretas a algunos líderes abertzales, el seguimiento de sus actividades públicas y la comprobación de que estaba cumpliendo con la estrategia etarra desvelada en sus propios documentos. «Del seguimiento simple de la prensa se ve que no eran algo teórico [los planes de ETA], sino que se sus iniciativas se estaban ejecutando».
Los investigadores concluyeron que quienes comparecieron en rueda de prensa el 16 marzo de 2009 eran, en realidad, una «comisión-dirección» muy similar a la que Batasuna había puesto en marcha años antes. La integraban miembros de Ekin, Batasuna, Gestoras pro Amnistía, LAB, el frente juvenil... «Representaba a todo el espectro del MLNV. No parecía nada espontáneo», señaló, en referencia a la afirmación de Otegi de que el grupo había surgido de manera espontánea entre algunos miembros destacados de la izquierda abertzale.
Entre los documentos mencionados por el fiscal y el comisario se encontraba uno -reproducido en esta página- incautado en el dormitorio de Otegi, quien ha reconocido haberlo escrito. Fija un calendario del anterior proceso de paz y añade lo que debe hacer tras llegar a un primer acuerdo: «Hacer karpeta y pasar a Bateragune». A juicio del experto, significaba que Otegi, miembro de la comisión negociadora, debía dar cuenta al órgano superior, Bateragune, del que también formaba parte.
A preguntas del fiscal, el policía explicó que en esos momentos ETA está ejecutando una fase que llama «proceso democrático», en la que busca unirse a otras fuerzas independentistas -PNV excluido- y que requiere un alto el fuego estratégico. «Es una mera etapa. ETA ha declarado lo que ha declarado, no ha dicho que haya abandonado la estrategia político-militar -que sigue vigente-, que vaya a abandonar el terrorismo y a entregar las armas. Y los datos que nosotros tenemos indican más bien lo contrario», dijo.
Según explicó, ETA activó el alto el fuego después de «llenar el cerdito», expresión con la que la propia banda indica que ha reunido fondos para poder frenar la extorsión. «Pero, además, ha llenado la despensa», añadió el comisario, refiriéndose a las recientes detenciones de etarras que estaban robando coches o aprovisionándose de material electrónico. «Los militantes de ETA siguen actuando en Francia [...] ETA ni se ha disuelto ni ha tomado esa decisión», concluyó el testigo-perito, al que hoy le toca someterse al interrogatorio de las defensas.
FERNANDO LÁZARO / Madrid
05/07/2011
'Hay mucha sensiblería y candidez al interpretar a ETA'
Pregunta.- Bildu en las instituciones, políticos y víctimas distanciados...Respuesta.- Vivimos una etapa muy complicada. El mundo de Batasuna y ETA ha conseguido colar su primera ilusión óptica con Bildu. Ahora están intentando aplicar la segunda fase del engaño y la ilusión colectivos. Van a intentar convencernos de que quien no se quiera reconciliar con ellos es un rencoroso. Hay un tabú sobre pensar en términos distintos de los que marca el mundo del nacionalismo violento.
P.- ¿Está perdiendo la democracia la batalla con el terrorismo?
R.- Hay que persuadir a los líderes políticos para que entiendan que el mundo de Batasuna y de ETA tiene menos prisa que quienes están en periodos cortos en las instituciones.
P.- Da la sensación de que se interioriza que, una vez que no hay asesinatos, no hay terrorismo.
R.- El terrorismo es una parte, o un instrumento de una estrategia político-militar, de una estrategia que durante muchísimas décadas ha buscado una influencia superior. No hay que equivocar los términos. Hay gente que piensa que la eliminación de la muerte genera una especie de manto, de olvido, de impunidad, y quien hace esto se equivoca. Buscan generar un tabú del silencio. Mucha gente de muy buena voluntad, con candidez arcangelical y una fantasía buenista impresionante acepta algo tan aberrante como la cuestión de la reconciliación, que a lo que más se parece es a aquello que ocurría durante el franquismo, durante el catolicismo franquista, cuando se obligaba a las mujeres maltratadas a la reconciliación con sus esposos agresores. ETA intenta que las víctimas tengan que asumir una cuota de culpa. Y se les presiona para convertirlas en seres rencorosos.
P.- ¿Se está renunciando a apostar por la derrota de ETA?
R.- La cuestión es: ¿va a vencer el Estado de Derecho? ¿O van a vencer finalmente porque se salgan de rositas con cierta impunidad adquirida, y además impunidad social, los que han provocado esta situación? Pues no lo sé, porque esto está sin definir, va a depender, se está jugando este partido. Está en juego qué calidad de democracia vamos a tener, porque si hubiera impunidad sería el elemento más corrosivo para las reglas de juego de toda la sociedad.
P.- ¿Qué se le viene a la cabeza cuando vio al presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala, el Día de las Víctimas en el Congreso?
R.- Lo primero, la sensación de destrozo moral que están sintiendo en este momento los concejales socialistas de Andoain, y especialmente el momento en que policías locales, que seguramente son gente que les respeta profundamente, les impidieron el paso al ayuntamiento porque iban con escoltas. La segunda imagen que me vino a la cabeza fue la de mi cuñada, que iba en un coche electoral y fue insultada, amenazada y llamada fascista por mentecatos en San Sebastián durante la campaña electoral. Y que, además, en una sociedad tan viciada moralmente como la vasca, donde todo el mundo se quiere llevar bien con los asesinos, es una especie de síndrome de Estocolmo que ese tipo de gente tenga resultados electorales tan impresionantes. Bueno, todas esas cosas y todos los comisarios políticos que van entrando en las instituciones que son de Batasuna, todo eso me vino a la cabeza, cuando vi al altísimo dignatario de nuestras instituciones que estaba en aquel salón.
P.- Algo se mueve en el mundo penitenciario desde el Gobierno.
R.- Parece que lo que se lleva adelante desde hace dos años es tendente a la reinserción y al arrepentimiento de los etarras. No conozco el alcance, cuando procesos como la legalización de Bildu les puede hacer pensar que pueden aspirar a la impunidad.
P.- ¿Cree que tratan de poner una mordaza a las víctimas?
R.- La sensación que he tenido durante los últimos meses, tocando puertas para hablar y para intentar reflexionar con otras personas influyentes en distintos ámbitos de la opinión pública española, es que había mucha pereza intelectual a escuchar de una forma profunda lo que proponemos.
P.- ¿Cree que serían necesarios cambios en Moncloa para plantar cara al órdago de la izquierda abertzale?
R.- No sé. Me da la impresión de que hay mucha candidez en la evaluación de la estrategia político-militar de ETA en muchos entornos. Porque en el fondo hay bastante sensiblería cristiana mal entendida.
P.- ¿El todos somos buenos?
R.- El buenismo con gente tan bregada en la clandestinidad, en la ilegalidad, en el disimulo, en el engaño o en la crueldad extrema me parece un arma desequilibrada, un instrumento de apreciación de la realidad un poco desequilibrado.
Bayona (Francia)
05/07/2011
Aurore Martin reaparece en un festival de música vasca
Martin, de 32 años, se dejó ver en el suroeste de Francia con motivo de este encuentro musical, que reunió a cerca de 20.000 personas en tres días. La presidenta del festival EHZ (Euskal Herria Zuzenean, País Vasco en Directo), Elisabeth Aizager, señaló que el acto «estaba dentro de la dinámica» de las actuaciones que organiza el grupo de personas que protegen a Martin, según informa France Presse.
«Hemos acogido a Aurore Martin entre nosotros», explicó Aizager entre los aplausos del público. «La apoyamos y os invitamos a tomar el relevo de esta muralla popular», comentó, en referencia a su detención frustrada, el pasado 21 de junio.
Martin debía ser entregada a España según un dictamen definitivo del Tribunal Supremo de Francia, para ser juzgada en relación con sus actividades entre 2005 y 2008 en Batasuna en territorio español. La Audiencia Nacional dictó una orden de detención por un presunto delito de integración en organización terrorista
Están actuando como siempre, con la prepotencia que les caracteriza sabiendo que les apoyan los de las pistolas.Lástima de gobierno de piratas que tenemos, porque se iban a enterar de lo que vale un peine.De hecho, ellos mismos reconocen que tienen miedo a la entrada del pp en el gobierno, que pena, con lo valientes que son.
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