F. LÁZARO / A. ESCRIVÁ / Madrid / El Mundo
La Policía francesa detuvo a primera hora de la noche de ayer a cuatro destacados miembros de la organización terrorista ETA. Entre ellos se encuentra el jefe del denominado aparato militar de la organización, Alejandro Zobaran Arriola, alias Xarla, según confirmaron fuentes de la lucha antiterrorista. Éstas, no obstante, aclararon que falta cotejar sus huellas dactilares para asegurar por completo su identidad. Sigue en página 5
La captura de los sospechosos se produjo en una casa rural de Beaulencourt, en la zona norte de Francia, concretamente en el departamento de Paso de Calais, cercano a la frontera con Bélgica. Según ha podido saber este periódico, los cuatro detenidos presentaron documentación falsa para registrarse.
Al cierre de esta edición, la Policía estaba registrando el chalé en el que se alojaban Xarla y los supuestos lugartenientes que le acompañaban, y no se descartaba que se llevasen a cabo más detenciones a lo largo de la madrugada. Durante el registro, la policía francesa ha encontrado al menos dos pistolas.
Fuentes de la lucha antiterrorista explicaron a este periódico que un vecino de la zona vio con recelo a los jóvenes y alertó a principios de esta semana a la Gendarmería. Los agentes comprobaron que las matrículas de los coches que utilizaban estos presuntos integrantes de ETA estaban dobladas, lo que les llevó a aumentar las precauciones.
También obtuvieron otros indicios que les llevaron a la conclusión de que los sospechosos podían pertenecer a la banda terrorista, por lo que alertaron a la Policía Judicial, que contactó, al mismo tiempo, con los agentes de la Comisaría General de Información españoles.
Los cuatro presuntos terroristas podrían pertenecer a la estructura militar de ETA. Todos son varones, lo que deja fuera de la operación a las dos mujeres a las que se sitúa también en la dirección de la banda, Iratxe Sorzabal e Izaskun Lesaka.
De confirmarse que Alejandro Zobaran era el responsable de los comandos de la banda, sería el sexto jefe militar de ETA que cae en manos de las Fuerzas de Seguridad en poco más de dos años.
La sangría para la banda comenzó el 17 de noviembre de 2008, cuando fue arrestado en Cauterets Garikoitz Aspiazu, alias Txeroki. Sólo 21 días después cayó su antiguo mano derecha y sucesor al frente de los comandos, Aitzol Iriondo, Gurbitz, detenido en Gerde.
Tras ellos, todos los nuevos jefes militares duraron muy poco tiempo. Jurdan Martitegi, Arlas, aguantó cuatro meses hasta su arresto en Perpiñán el 18 de abril de 2009. Ibon Gogeaskoetxea, Zuba, estuvo 10 meses en el puesto y cayó en Cahan el 28 de febrero de 2010. Y Mikel Karrera Sarobe, Ata, estuvo apenas dos meses y fue detenido el 20 de mayo del año pasado en Bayona, en una operación que entonces fue valorada por el Gobierno como el descabezamiento «casi definitivo» de la banda terrorista.
No obstante, otras fuentes consultadas por este periódico señalan que Xarla es uno de los jefes del entramado militar, aunque no su máximo responsable, lugar en el que sitúan a Lesaka. Las mismas fuentes aseguran que el detenido es un huido del comando Urederra que también estuvo en el comando Barcelona. Uno de sus compañeros de este comando, al que ayudaba en el montaje de explosivos, destacaba su personalidad inestable y poca especialización.
Las detenciones se producen apenas una semana después de que la Guardia Civil, con información facilitada por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), llevara a cabo una operación en Vizcaya que se saldó con el desmantelamiento del comando Otazua, el más activo de los últimos años, integrado por miembros legales de ETA.
Enhorabuena a los compañeros, otros asesinos menos.
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