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El presidente de Plataforma per Catalunya (PxC) y candidato a la Presidencia de la Generalitat, Josep Anglada, ha lamentado en Castelldefels que la localidad tenga más de un 25% de población inmigrante. Anglada acusó a “la clase política podrida y parasitaria de este país de ser la gran culpable de la situación en que se encuentra en este momento Cataluña”.
Para el líder identitario, “el 28-N empezará una nueva etapa en Cataluña que pondrá fin a la clase política actual”, y añadió que “la irrupción de PxC en el Parlament será la única en defensa de nuestra gente, de la gente de siempre, de la gente de casa”.
Recordó también que “el 28-N toca decidir si queremos que Cataluña continúe sufriendo esta invasión silenciosa o que se inicie el proceso de repatriación de los inmigrantes”. Y añadió: “Nos jugamos si la inseguridad y el miedo se continúan apropiando de nuestras calles, o si alguien pone orden con duras y drásticas medidas contra cualquier clase de delincuencia. Si los políticos continúan malgastando nuestro dinero en corruptelas y caprichos o si se impone la seriedad, la austeridad y el servicio a la comunidad como normas de la administración. Si seguiremos la misma deriva de los últimos 30 años, o si se abre una puerta a la esperanza para una Catalunya mejor”.
Para que todo esto sea posible, acabó diciendo Anglada, sólo hay una solución: “que el 28-N se llenen las urnas de papeletas de la PxC”.
Estos parece que tienen las ideas claras en ese aspecto. Ya se verá lo que ocurre, porque la gente está hasta el moño de todo.
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