martes, 4 de mayo de 2010
Zapatero apuesta por implicar a la OTAN en la lucha contra el nuevo terrorismo
El jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, apostó hoy por implicar a la OTAN en la lucha contra el terrorismo internacional, "el riesgo más acuciante para la seguridad", y animó a la Alianza a sumarse a la reducción de armas nucleares con "suficientes garantías".
Zapatero hizo estas declaraciones a los medios de comunicación junto al secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, después de visitar por vez primer oficialmente junto a su ministra de Defensa, Carme Chacón, la sede de la organización en Bruselas.
En su reunión, analizaron el nuevo concepto estratégico de la OTAN que debería aprobarse en noviembre en la cumbre que se celebrará en Lisboa y la misión militar en Afganistán.
"España cumple con sus compromisos en Afganistán, nuestros soldados cumplen ejemplarmente, el área de nuestra responsabilidad evoluciona favorablemente y vamos a seguir cumpliendo con nuestros compromisos", subrayó Zapatero.
Rasmussen elogió la aportación de España en el país asiático, recordó las bajas que ha padecido y agradeció la última ampliación del contingente, compuesto ya por 1.500 militares.
Zapatero, quien estimó que la OTAN "se juega mucho en Afganistán", ratificó su apoyo a la actual estrategia para el país, que se evaluará en la cumbre de Lisboa, y apostó por cumplir el horizonte temporal que se han impuesto los aliados para comenzar a transferir responsabilidades de seguridad a la policía y los militares afganos antes de fin de año.
Zapatero invitó a Rasmussen a visitar oficialmente España, un viaje que tendrá lugar después del verano y antes de la cumbre de la Alianza de noviembre, y en el que espera que el secretario general de la OTAN se reúna, además de con los mandos militares, con los grupos parlamentarios y con representantes de la sociedad civil.
Según apuntaron fuentes de la organización, Rasmussen destacó a Zapatero la importancia de mostrar a la sociedad que la misión en Afganistán es de la OTAN, no sólo de Estados Unidos, y subrayó por ello la importancia de la contribución española.
Ante la prensa, elogió el apoyo de los españoles a los gobiernos locales de la región oeste del país, donde están desplegados, una de las zonas más remotas y pobres que aprecia el esfuerzo militar y de desarrollo que están realizando las tropas.
El secretario general reconoció que 2010 es un año "determinante" para el país asiático y refrendó como Zapatero la estrategia de los aliados, según la cual "seguridad, gobierno y desarrollo tienen que ir de la mano".
Según apuntó, una de las principales prioridades en estos momentos, en la que también participa España, es la formación de militares y policías afganos para que puedan comenzar a gestionar las labores de seguridad ellos mismos antes de final de año, un traspaso que se haría de forma gradual.
Zapatero, quien presentó a España como un socio "fiable y activo de la OTAN", subrayó la importancia del nuevo concepto estratégico que se aprobará en la cumbre de noviembre y apostó por renovar el carácter "político" de la organización.
En este contexto, abogó también por incluir la lucha contra el terrorismo internacional, "en todas sus manifestaciones contemporáneas", en las líneas estratégicas de la organización
Según apuntaron fuentes de la OTAN, Zapatero dejó claro en su encuentro con Rasmussen que la prevención del terrorismo procedente del norte de África es un punto clave para el Gobierno español,
Ambos fueron cautos cuando fueron preguntados por la posibilidad de retirar de Europa las armas nucleares estadounidenses.
Ramussen reiteró su conocida posición de que, aunque está a favor de la reducción de los arsenales atómicos, la OTAN debe conservar "un elemento de disuasión nuclear creíble" mientras exista este tipo de armas existan en el mundo.
A su juicio, la unidad aliada resulta crucial y las decisiones se tomarán por consenso, sin pasos unilaterales.
Zapatero refrendó esta opinión y destacó la importancia del último acuerdo de reducción de armas nucleares firmado por los presidentes de EEUU, Barack Obama, y Rusia, Dmitri Medvédev.
En su opinión, la OTAN debe sumarse a ese proyecto, pero siempre garantizando su capacidad disuasoria, ya que se trata de una organización que tiene como principal objetivo mantener la seguridad.
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