miércoles, 13 de julio de 2011

Teddy Bautista se rinde y deja sus cargos en la SGAE y en el resto de filiales


DARÍO PRIETO / Madrid

13/07/2011/El Mundo

Zapatero embusteroDespués de un tenso tira y afloja interno, Teddy Bautista presentó ayer su renuncia ante la Junta Directiva de la SGAE, que la aceptó y le relevó de todos sus cargos en la sociedad y en sus filiales. En realidad, el guión para ayer era otro: su reelección al frente de la entidad de gestión. Pero la Operación Saga truncó el plan.

Sabino Méndez, autor de canciones míticas de Loquillo y los Trogloditas como La mataré y Cadillac Solitario, fue el encargado de leer, a las puertas del Palacio de Longoria, el comunicado de las decisiones de la Junta Directiva de la SGAE, elegida en las elecciones celebradas un día antes de la intervención de la Guardia Civil en la sede de la entidad. En dicho comunicado, además de aceptar la renuncia de Bautista -«relevándole de todos sus cargos en la Sociedad General de Autores y Editores y entidades filiales, quedando sujeto a las investigaciones en curso», según leyó Méndez-, se confirmó lo anunciado en rueda de prensa una semana antes: la creación de una «Comisión Rectora», encargada de «la dirección y supervisión de la gestión diaria» de SGAE, compuesta por cinco miembros y presidida por un «gestor externo e independiente que asuma las máximas funciones ejecutivas encomendadas en los estatutos al presidente del Consejo de Dirección».

El encargado de ocupar este puesto será Miguel Satrústegui, ex subsecretario de Cultura y ex secretario del consejo de administración de Prisa, según confirmaron a este periódico fuentes próximas a la SGAE. Los integrantes de la Comisión Rectora serán el dramaturgo Ernesto Caballero, el cineasta Imanol Uribe, el cantante Víctor Manuel, el compositor Tomás Marco y el directivo de la discográfica Warner Álvaro de Torres.

El anuncio llega después de 11 días de tensión en los que, según fuentes próximas a la entidad de gestión de derechos de autor, Bautista se resistió a abandonar totalmente el poder, a pesar de que ya no contaba con la confianza de la mayoría de la Junta, como afirmó Ernesto Caballero. En una entrevista concedida a este periódico el pasado mes de mayo, el hasta ayer máximo directivo de la SGAE dijo lo siguiente, preguntado por la posibilidad de tirar la toalla: «Alguna vez. Pero no en tirarla, sino en devolverla. Yo me seco con ella, mientras aquel que me la ha dado lo vea razonable. Otra cosa es que me dedicase a cortarla y venderla en trocitos. Pero, vamos, en el momento en que no depositen su confianza en mí, me voy». La Junta quiso manifestar su «agradecimiento a D. Eduardo Bautista y expresar la mayor confianza en su honorabilidad».

De este modo, se pone fin a 16 años de control de Bautista sobre la entidad. Una salida no muy digna para alguien que podría haberse jubilado hace tres años y que presumía de haber levantado a la sociedad de autores, aumentando la cantidad recaudada durante su gestión desde los 18 millones de euros hasta los cerca de 350 actuales. «Mi gestión ha permitido que se incremente el reparto a los socios en algo más de un 2100%; sí, he escrito bien, 2100%», dijo en un chat con los socios.

A la reunión de la Junta acudieron 25 de los 38 miembros electos en los comicios del pasado 30 de junio. Algunos de ellos, como Mikel Erentxun, José Luis Cuerda, Yolanda García Serrano, Ignacio del Moral y Ángel Illarramendi se dejaron ver a la entrada del Palacio de Longoria, sede central de la SGAE en Madrid.

A quienes no se vio fue a los representantes de la principal candidatura opositora en las elecciones de la SGAE, encabezada por José Miguel Fernández Sastrón, invitados a participar de alguna forma en el proceso de «renovación de la SGAE, con la misión de examinar la totalidad de sus actividades y consultar con los socios las reformas estatutarias pertinentes para garantizar la democracia y transparencia, tendiendo puentes a todos los socios y colectivos que quieran participar», tal y como se detalla en el comunicado hecho público ayer.

En otro comunicado, la candidatura de Sastrón (De Otra Manera) celebró ayer la renuncia de Bautista, «dada la gravedad de los delitos que se le imputan y el perjuicio que su permanencia en el cargo ocasionaba a la los 100.000 socios de SGAE», y la calificó de «única decisión posible». También denunció que la Junta Directiva constituida ayer «no tiene ninguna legitimidad, a la vista de los indicios de manipulación del proceso electoral detallados por el juez Pablo Ruz en su auto». Por eso, no consideran «ninguna decisión que se derive de ella» y muestran sus dudas de que «un equipo que ha basado todo su programa electoral en un seguimiento ciego a las propuestas del Sr. Bautista tenga credibilidad como para prometer ahora códigos de buen gobierno, transparencia y democracia, ya que no dio ninguna muestra de ello a la hora de concurrir a las elecciones».

En el comunicado leído por Méndez se ratificó lo anunciado el pasado martes, referente al encargo de «una investigación interna» a «un jurista de reputado prestigio, externo a la SGAE», para la elaboración de un informe que se entregará a la Audiencia Nacional. También se anunció el nombramiento del Patronato de la Fundación y los órganos de Gobierno de Arteria, la división que controla la red de teatros de SGAE por todo el mundo y uno de los principales focos de investigaciones en la actualidad por supuestas irregularidades. Estos órganos de gobierno contarán con «con plenas facultades para la reforma integral de todas sus actividades» y «con la participación de todos los colectivos».

SANTIAGO GONZÁLEZ

13/07/2011

Se aceptan evidencias

Nunca hasta ayer a lo largo de su historia había tenido el Palacio Longoria tanto carácter vaticano desde que lo construyó el arquitecto José Grases Riera hace 109 años. Los medios de comunicación velaban ante el cónclave que mantenía reunida a la Junta Directiva de la SGAE desde primera hora de la tarde. Tres horas después se tenían las primeras noticias: Teddy Bautista presentaba su dimisión y la Junta se la aceptaba, al contrario de lo que habían dado a entender en una rueda de prensa sorprendente los cantantes Víctor Manuel y Caco Senante, que vaya nombre tan contraindicado para un asunto como el que los ocupa.

La dirección de la SGAE expresó su aceptación en el primer punto de un comunicado de siete, en el que, además, lo relevan de todos sus cargos «quedando sujeto a las investigaciones en curso», en una expresión notable: dicta una disposición para la que muy probablemente no tenga jurisdicción la SGAE sobre la Audiencia Nacional. Dicho de otra manera: no parece que el juez Pablo Ruz necesite su permiso para seguir investigando.

El asunto de la corrupción al amparo de la SGAE estalló cuando Bautista y su equipo acababan de ganar con brillantez las elecciones para renovar la cúpula de la sociedad. Todos los hechos que se van conociendo avalan el auto de Ruz sobre el desvío de fondos de la SGAE hacia el entramado societario diseñado por Neri a partir de la SDAE, mercantil con ánimo de lucro, de la que colgaban varias empresas que proveían sus servicios con los precios inflados. Unos 30 millones de euros.

Al asunto se suma ahora el proyecto Arteria, un sueño para una red de teatros que contaba con un presupuesto de 300 millones de euros. Uno de los dos arquitectos de cámara de Arteria, que había desarrollado el proyecto de un teatro en Sevilla, ha denunciado que pretendían obligarle a firmar certificados de obra sin permitirle el acceso a datos contables. Al negarse, la organización deja de atender sus facturas y él renuncia a terminar la obra y acude a los tribunales.

En el fondo, todos los malos del imaginario colectivo acaban por tener un aire de familia. Teddy Bautista es para la opinión pública española, excepción hecha de los creadores que viven de los derechos que generan sus obras, un villano parecido al banquero de los fans más acérrimos del último Rubalcaba, y ambos remiten al viejo Fagin que Dickens retrató en Oliver Twist: un judío rapaz y sin sentimientos. Lo malo para Bautista es que ha pasado a ser del club de los banqueros para quienes antes eran de los suyos, ha sido expulsado de la Fundación Alternativas. No debemos olvidar que ahora, uno de los valores sociales en alza para el socialismo gobernante son los indignados, y que estos reparten equitativamente sus fobias entre quienes se oponen a las descargas ilegales y los banqueros.

Es razonable, en cambio, que la SGAE exprese en el 7º punto de su comunicado su presunción de inocencia hacia quien, hasta hace 15 días, era su líder indiscutido: «La Junta Directiva quiere manifestar su agradecimiento a D. Eduardo Bautista y expresar la mayor confianza en su honorabilidad».

PALOMA DÍAZ SOTERO / Madrid

13/07/2011

El PP saca adelante la supresión del canon digital

Apoya una proposición de los 'populares' que pide sustituirlo por «otras fórmulas»

Zapatero embustero Ocho años ha tardado en derrumbarse al canon digital. Es el tiempo transcurrido desde que se impuso la polémica tasa, a la compra de soportes digitales primero (Aznar, 2003) y de aparatos de reproducción después (Zapatero, 2006), para compensar a los creadores por las copias privadas que presuntamente harían los usuarios.

Ayer, el canon quedó deslegitimado en el Congreso de los Diputados a la espera de reforma. El PSOE y el resto de grupos parlamentarios apoyaron la petición del PP de suprimirlo. Su proposición no de ley insta al Gobierno a eliminar dicho impuesto como vía de compensación a los autores por la copia privada, pero también pide que «se sustituya por otras fórmulas menos arbitrarias e indiscriminadas y, por tanto, más justas y equitativas de remuneración de la propiedad intelectual, basadas en el uso efectivo de las obras y prestaciones», no en el uso supuesto.

La proposición fue defendida por el diputado del PP José María Lassalle, que subrayó que «el modelo del canon digital está agotado», al haber sido «superado por los acontecimientos». «Los contenidos se consumen hoy de un modo que nada tiene que ver con las prácticas habituales de otros tiempos», argumentó Lassalle, que admitió que el rápido desarrollo de las nuevas tecnologías ha dejado obsoleta la legislación de la propiedad intelectual.

«Las prácticas de compensación que encontraron en el canon una justificación, hoy, con el desarrollo de las nuevas tecnologías e internet, se hacen absolutamente innecesarias», valoró.

«Si un autor quiere obtener ingresos en la red, lo que tiene que hacer es procurar que su obra esté accesible en cuantos lugares sea posible y al precio más razonable y competitivo», advirtió el diputado, que se mostró convencido de que «los nuevos modelos de negocio permitirán que se compense a los autores por su trabajo y su creación».

El portavoz del grupo socialista, José Andrés Torres Mora, justificó el voto socialista en que el PP no pretende suprimir el canon, sino sustituirlo, informa Efe. Así, sostuvo que el derecho a la copia privada provoca un perjuicio al creador que hay que compensar, por lo que si se pretendiera suprimir la compensación por copia sin más, habría que prohibir la copia.

En cualquier caso, el canon digital tenía los días contados. Una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE declaró en octubre que su aplicación indiscriminada no era conforme al derecho comunitario.

Con el propósito de cumplirla, cuando se aprobó la Ley Sinde el pasado 6 de marzo, el Gobierno se comprometió a transformar el canon en los tres meses siguientes, es decir, antes del pasado 6 de junio.

De hecho, en la redacción de la proposición aprobada ayer, el PP ha mantenido que la supresión y sustitución del canon sea «antes del 6 de junio de 2011», una manera de «poner en evidencia el incumplimiento del Gobierno», según explicó José María Lassalle.

«Hace falta encontrar un nuevo equilibrio» proclamó Lassalle a modo de corolario. Pero a quien le corresponde encontrarlo es el Ministerio de Cultura. Su titular, Ángeles González-Sinde, ya manifestó la semana pasada que el canon digital, «sin duda, debe ser transformado». «Estamos buscando esa solución alternativa que reclaman los usuarios», anunció la ministra, que hoy comparece en comisión parlamentaria para hablar del presunto desvío de fondos de la SGAE.

También ayer, seis entidades de gestión de derechos de autor llamaron «a la responsabilidad de los grupos políticos y de la Administración para que arbitren «soluciones justas y equilibradas dentro del marco legal europeo», informa Europa Press. Recientemente algunas fuerzas políticas han propuesto fijar una compensación a cargo de los Presupuestos Generales del Estado, cosa que no permite la legislación europea

1 comentario:

  1. Menuda cuadrilla estos de la ceja. Hacen lo mismo que sus colegas de la casta del psoe, trincar y mangonear.

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