martes, 14 de septiembre de 2010
O una cosa, o la otra
14 de Septiembre de 2010 - 11:37:00 - Luis del Pino
Publica hoy El Mundo una crónica sobre el juicio por tráfico de droga al que han sido sometidos Rafá Zouhier, Antonio Toro y Lotfi Sbai. Las actividades de compraventa de hachís habrían tenido lugar inmediatamente antes, durante e inmediatamente después del 11-M, cronología ésta que, analizada en detalle, lleva a poner en cuestión una vez más la historia sobre el tráfico de explosivos que nos contaron. A lo que estaban esos traficantes era a otra cosa y no resulta muy creíble que estuvieran simultaneando su actividad de camellos de medio pelo con la de preparación del mayor atentado de la historia de Europa.
Esa cronología apunta, asimismo, a un segundo aspecto de importancia: a lo fácil que resulta echar mano de cualquier trama de delincuentes más o menos controlados para construir, ex novo, una historia falsa con la que "explicar" de donde salieron los explosivos del 11-M. Si quieres tapar un atentado con una historia inventada, puedes echar mano de cualquiera de las tramas turbias más o menos controladas de las que dispongas y construir, a partir de ahí, una parte de la historia oficial. Aunque eso requiere, por supuesto, que al menos alguno de los componentes de esa trama esté dispuestos a comerse voluntariamente el marrón y a seguir el juego de las mentiras arriesgadas.
Por lo que respecta al propio juicio, nada nuevo: las mismas tonterías de siempre por parte de Zouhier, que tiene bien interiorizado su papel (¡yo avisé, yo avisé!). El amigo Rafá parece no haberse dado cuenta todavía de que la función se acabó hace ya mucho tiempo y de que su papel resulta ya un tanto casposo.
Lo que no termino de entender es el editorial que el propio El Mundo le dedica al asunto, preguntándose por qué nadie hizo caso de los avisos de Zouhier. ¿De qué se supone que avisó Zouhier? ¿Del tráfico de Goma2-ECO?
Y, suponiendo (que ya es mucho suponer) que ese tráfico hubiera existido y que Zouhier hubiera avisado de que existía, ¿qué tiene que ver con el 11-M?
En mi libro "Golpe de régimen" (publicado hace ahora tres años) comentaba ya que las investigaciones del 11-M habían entrado en una fase en la que era preciso optar: o las pruebas del 11-M son ciertas y en los trenes estalló lo que nos dijeron (en cuyo caso se puede elucubrar todo lo que se quiera sobre las posibles "negligencias" que hubieran podido conducir al atentado), o las pruebas del 11-M son falsas, en cuyo caso es completamente irrelevante todo lo relacionado con esa Goma2-ECO que no pudo estallar en los trenes.
Cada cual tiene derecho a defender la teoría que prefiera. Los lectores saben cuál es la mía: que no hay nada en la versión oficial de la masacre que tenga absolutamente nada que ver con el atentado. Pero me parece bien que otras personas tengan la teoría contraria.
Lo que no se puede es tener las dos teorías a la vez, porque son incompatibles desde el punto de vista lógico.
O estalló Goma2-ECO en los trenes, o no estalló. Y, si no estalló, nada relacionado con ninguna trama (real o ficticia) de tráfico de Goma2-ECO puede tener nada que ver con el 11-M.
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Asi es, o es puta o no es puta, (como dice maria antonia), lo que no puede ser es las dos cosas, y hay está la cuestión. Buen libro Luis el titulado golpe de régimen.
ResponderEliminarNo nos merecemos un gobierno que nos mienta (palabras dichas por rubalcaba).