Una excavación en una de
las posiciones de trincheras de montaña del Frente Norte de la Guerra
Civil desvela que la tradicional morcilla de cebolla fue utilizada como
explosivo alternativo, pero el Ayuntamiento de León ignoró la
advertencia oficial para que no celebrara en octubre el mes de este
producto y expusiera a los ciudadanos a su volatilidad.
Las granadas encontradas en el cerro Castrilterrón que fueron cargadas con morcilla leonesa en la Guerra Civil.
Nacho Matachana
| 28/12/2018 - 09:32h.
El Ayuntamiento de León recibió el pasado 3 de julio
una advertencia de los Tedax para que suspendiera el mes de la morcilla
leonesa dentro de los actos de la Ciudad Gastronómica Española, tras
comprobarse en una excavación arqueológica que fue usada como explosivo
alternativo en la Guerra Civil Española.
Sin embargo, las autoridades municipales leonesas
desoyeron la advertencia de los Técnicos Especialistas en Desactivación
de Artefactos Explosivos y durante todo el mes de octubre expusieron a
los ciudadanos, dentro de los actos de la Ciudad Gastronómica Española, a
la volatilidad de este producto.
La consideración de explosivo alternativo de la morcilla de
cebolla leonesa se pudo certificar en los estudios posteriores a la
localización de unas extrañas granadas y artefactos caseros encontradas
en una excavación arqueológica de las trincheras del alto Castrilterrón,
un puesto defensivo republicano en el Frente Norte de la Guerra Civil.
Los arqueólogos, al encontrarlos sin haber sido detonados, llamaron a
los Tedax para desactivarlos. Pero al final no se produjo explosión por
carecer de pólvora en su interior.
Extrañados por no encontrar rastros de pólvora (pese a que
se encontraban intactos), pero sí evidencias de un extraño compuesto
biológico de color negro, los arqueólogos llevaron sus restos a la
Universidad donde los científicos buscaron mediante un espectrómetro de
masas la composición de los mismos. La sorpresa surgió al detectarse que
los artefactos explosivos estaban repletos de morcilla leonesa. Una
serie de pruebas químicas más confirmaron la volatilidad del compuesto y
se certificó la hipótesis de que pudiera haber sido usada como
explosivo alternativo de emergencia, debido a la escasa disponibilidad
de armamento de los republicanos en 1937.
Un croquis de las posiciones defensivas en
Castrilterrón. En rojo donde se encontraron los artefactos explosivos
con restos de morcilla leonesa en su interior.
Eso provocó que los artificieros enviaran una comunicación a
las autoridades municipales leonesas para que extremaran precauciones
durante la celebración del mes de este producto tras ser designado uno
de los productos estrella de la Capitalidad Gastronómica de España,
recomendando que no se celebrara para evitar volatilidades en los
ciudadanos leoneses.
"La advertencia se perdió entre tanto policía", aseguran fuentes municipales
Consultadas fuentes municipales de por qué razón el
Ayuntamiento pudo ignorar la clara advertencia de los artificieros de
las fuerzas de seguridad del Estado y permitir sin más que se celebrara
dentro de los actos de la capitalidad gastronómica la promoción de la
morcilla leonesa tras haber recibido esta comunicación, no han sabido
explicar de forma convincente a este periódico lo ocurrido.
La morcilla, dentro del 'Mes del Vino del Bierzo y la
Morcilla de León' fue agasajada a nivel nacional y, pese a la
recomendación de precaución se promocionó a bombo y platillo en la página web de la Capitalidad Gastronómica, que en el que se indica "la línea de fortaleza y consistencia de todos los productos derivados de la matanza".
Al parecer, según las mismas fuentes municipales, todo se
debe a un error provocado por el barullo provocado por tanta fuerza
policial ocupando el Ayuntamiento el día 3 de julio de este año. "Lo más
probable es que entre las cajas que se llevaron durante los registros
policiales de la Operación Enredadera
en el Consistorio de Ordoño se fuera traspapelada esa advertencia y por
eso no se ha llegado a hacer nada para evitar la degustación de la
morcilla leonesa; no es culpa nuestra que hubiera tanto jaleo ese día y
no se nos comunicara de nuevo", explican algunos funcionarios del
Ayuntamiento de la capital de la provincia.
La Policía, registró el 3 de julio el Ayuntamiento de León. Fotografía: Carlos S. Campillo (ICAL).
Por su parte, los encargados de llevar adelante los actos de
la Capitalidad Gastronómica 2018 y los miembros de la cúpula del
Gabinete de Alcaldía han criticado que las autoridades esatatales hayan
permitido que ocurra este desagradable fallo. "En el Ayuntamiento de
León se hace todo de forma excelente y exitosa, y es imposible que haya
habido un error por nuestra parte", explicaron. Para después matizar:
"En todo caso el problema será de quien no ha hecho las cosas bien. Si
tan problemático era el asunto deberían haberlo vuelto a comunicar,
nosotros no podemos tener la culpa de esta situación sobrevenida porque
está claro que ningún ciudadano puede criticarnos por nuestra gestión
municipal que es la mejor de España".
La Guardia Civil recomienda precaución
La recomendación de la Guardia Civil ante la localización de
explosivos de la Guerra Civil por parte de los ciudadanos es que no se
manipulen de ninguna manera y que se llame cuanto antes al cuartelillo
más cercano para que se hagan cargo de su manipulación, ya que pueden
ser altamente peligrosos al no saberse si están cargados realmente con
pólvora. Sin embargo, fuentes de la Comandancia de la Benemérita en León
no han confirmado que hayan recibido aún ningún protocolo activo sobre
la morcilla leonesa.
Según nuevas investigaciones conocidas por este periódico,
las últimas comprobaciones químicas en la Universidad han detectado que
también se han encontrado restos de morcilla de cebolla en los
casquillos de bala de la excavación arqueológica en Castrilterrón. Con
lo cual los expertos han deducido que ésta se podía usar "como armamento
de repetición".