lunes, 21 de noviembre de 2011

Los españoles se han sumado al cambio

El Mundo

El PP supera la mayoría absoluta de Aznar con 186 escaños y el PSOE se hunde con 110

Rajoy Presidente

Sin sorpresas. Mayoría absoluta amplísima para el Partido Popular y hundimiento del Partido Socialista. Los españoles han decidido encargar a Mariano Rajoy la tarea titánica de rescatar al país de una crisis que dura ya tres años y para la que hasta ahora no se atisba solución. Los ciudadanos han votado cambio sin medias tintas.

El PP ocupará 186 escaños en el Congreso, superando en 10 diputados la mayoría absoluta y mejorando la marca de José María Aznar en el año 2000 (183 diputados), en tanto que el PSOE pasa a instalarse en la oposición descendiendo hasta los 110. Rajoy ha conseguido que su formación gane las elecciones en todas las comunidades con las dos únicas excepciones de Cataluña y País vasco.

Rajoy PresidenteLos populares han logrado el 44,6% de los votos y los socialistas el 28,7%. La ventaja de los primeros sobre los segundos es pues de 15,9 puntos. Rajoy y los suyos han sumado 10,8 millones de votos, es decir, 600.000 más que en las elecciones de 2008, mientras que los socialistas han conseguido 6,9 millones frente a los 11,2 que obtuvieron hace cuatro años. Papeleta a papeleta, el PSOE se ha dejado en el camino de la crisis 4,3 millones de votantes.

El triunfo del Partido Popular, que ha conseguido 32 escaños más que en la pasada legislatura, no tiene contestación, pero más llamativo aún ha sido el descalabro del Partido Socialista, que ha perdido nada menos que 59 escaños.

Los socialistas, con Alfredo Pérez Rubalcaba como candidato, han caído en picado situándose en su peor resultado histórico, por debajo del obtenido por Joaquín Almunia en el año 2000 (125 diputados) y por debajo también de los logrados por su formación en las primeras elecciones democráticas de 1977 (118 escaños), que dieron lugar a la legislatura constituyente. El PSOE sólo consiguió ayer vencer en Sevilla y Barcelona.

Pasadas las 22.00 horas, Alfredo Pérez Rubalcaba telefoneaba a Mariano Rajoy para felicitarle por su victoria abrumadura y, a continuación, tras decidir con Zapatero que quería comparecer públicamente en solitario, apuntaba su intención de mantenerse en la brecha. De sus palabras se dedujo que podría batallar para ser él quien lidere su partido en la oposición.

«Hoy iniciamos una nueva etapa de nuestra historia», afirmó, antes de asegurar que había pedido al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, la convocatoria cuanto antes de un congreso ordinario del partido para elegir al nuevo secretario general. El todavía presidente del Gobierno acudirá hoy a la reunión de la Ejecutiva de su partido y anunciará, posiblemente para el próximo sábado, la reunión del Comité Federal que fijará la fecha del Congreso. Zapatero, además, pedirá a todos unidad para enfrentarse al reto tanto interno como externo que tienen por delante.

Mariano Rajoy, el ganador, comparecía poco antes de las 23.00 horas. Sus palabras fueron para prometer que «no habrá sectarismo ni rencillas que retrasen el esfuerzo de todos y para todos. Será», recalcó, «un esfuerzo solidario y equitativo».

Afirmó su intención de convocar de inmediato a todas las comunidades autónomas para «afrontar la situación» y aseguró su decisión de volcarse en el trabajo que ha de realizarse en la Unión Europea. «España ha decidido abrazar el cambio y para ello quiero convocar a todos», afirmó.

Pero, además de la victoria del PP y el descalabro del PSOE, las urnas han dibujado un Parlamento en el que tendrán cabida un mayor número de fuerzas que las conocidas en la pasada legislatura.

Así, como novedad, se estrenará en la Cámara la izquierda abertzale, representada por Amaiur, que ha conseguido un espectacular resultado -siete diputados- que no le permitiría formar grupo parlamentario propio aun superando a la que hasta ahora ha sido la fuerza representativa del nacionalismo vasco, el PNV, que sólo ha obtenido cinco escaños aunque su número de votos en el País Vasco haya sido mayor que el de los abertzales.

Entra también en el Parlamento el partido creado por el ex popular Francisco Álvarez Cascos, Foro de Ciudadanos, FAC, que ha logrado un escaño. Así como la fuerza valenciana Compromís, también con un representante.

Como consecuencia del hundimiento de los socialistas, se ha producido, además, un ascenso impresionante de Izquierda Unida, la tercera fuerza política a nivel nacional.

Liderada ahora por Cayo Lara, formará grupo con 11 diputados. Un auténtico éxito si se tiene en cuenta que en las elecciones de 2008 sólo consiguió dos escaños, hasta el punto de llegar a ser visto, tras años de declive, como un partido enormemente perjudicado por la Ley Electoral que podía entrar en vías de extinción. Las de ayer han sido las elecciones de su renacimiento gracias a la enorme fuga de votos de izquierda que ha padecido el PSOE. De hecho, IU ha conseguido saltar de los 969.000 votos de las generales de 2008 a más de 1,6 millones.

Importante también el crecimiento de los nacionalistas catalanes moderados. En el voto de los catalanes no parece haber hecho mella la durísima política de ajustes llevada a cabo por Artur Mas desde que hace un año consiguiera ocupar la Generalitat.

CiU ha visto aumentar su cosecha en más de 200.000 votantes. Ha superado la barrera del millón de votos y se consolida como primera fuerza política en Cataluña. Conseguirá de esta forma sentar a 16 diputados en el Congreso, frente a los 10 que ha tenido en la pasada legislatura.

Precisamente Cataluña ha sido una de las comunidades, tradicionalmente granero de votos socialistas, en el que el descalabro del PSOE ha sido mayor, con una pérdida de casi 800.000 votantes.

Los populares, por el contrario, han logrado en esta comunidad un buen resultado con 100.000 votos más que hace cuatro años.

Andalucía, el otro gran feudo socialista, también le ha reservado una amarga sorpresa a Rubalcaba. En esta Comunidad el PSOE ha perdido casi 800.000 sufragios que han pasado, en buena medida, a sumarse al PP y a IU. Con estos resultados todo parece indicar que Andalucía pasará, en marzo, a estar gobernada también por el PP.

Las urnas, además, han confirmado el crecimiento de UPyD, la formación liderada por Rosa Díez, que de haber ocupado un solo escaño pasará ahora a contar con cinco representantes. UPyD ha triplicado casi sus votos. También el partido de Rosa Díez ha sabido atraer hacia sus postulados a una buena parte de los votantes que han huido del Partido Socialista.

En cuanto a las formaciones pequeñas de carácter nacionalista, cabe señalar el descenso de ERC, que aun así conserva sus tres diputados, como BNG y Coalición Canaria, que mantienen los dos escaños de esta legislatura. Finalmente, la navarra Geroa Bai, heredera de Nafarroa Bai, también consigue reeditar el puesto en el Congreso que logró en 2008.

1 comentario:

  1. Pues felicidades al pp por su exito, y a los españoles por expulsar y hundir a los maltratadores de este país.

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