viernes, 14 de octubre de 2011

Blanco obligado a suspender la privatización de los aeropuertos


C. SEGOVIA / M. GÓMEZ / Madrid

14/10/2011/El Mundo

La situación del mercado, la oposición del PP y las sospechas por el 'caso Campeón' le fuerzan a desdecirse de su compromiso

Rubalcaba, embustero y payasoEl ministro de Fomento, José Blanco, se vio ayer obligado a cancelar la concesión del contrato del siglo de gestión aeroportuaria. Es el segundo fiasco en menos de un mes para la imagen de la economía española, tras la renuncia a privatizar Loterías y Apuestas del Estado. Blanco deja para el próximo Gobierno la decisión de vender la concesión de la gestión de los aeropuertos de Barajas y El Prat durante 25 años, que iba a reportar a las arcas del Estado alrededor de 11.000 millones de euros. Hasta ayer, el objetivo del Ejecutivo era el de resolver esta privatización en vísperas del 20-N.

El anuncio se produjo ayer, mediante un comunicado oficial de Aena, apenas seis días después de que el propio Blanco se comprometiera en nombre del Gobierno el pasado viernes a mantener el calendario. El pasado día 7, en rueda de prensa en Moncloa, Blanco aseguró, sin que nadie le preguntara, que el Ministerio iba a adjudicar este contrato el próximo 17 de noviembre, antes de las elecciones. «Vamos a seguir con el proceso adelante, tal y como se vino estableciendo, y en este sentido quería manifestarlo ante las dudas que surgen, creo que intencionadas, por parte de gente que quiere poner dificultades al propio proceso», afirmó.

Esa misma semana, sin embargo, los representantes de los grupos españoles que optaban a la licitación mantuvieron varias reuniones con los responsables de la sociedad aeroportuaria. Los aspirantes a gestionar El Prat y Barajas, según fuentes de los consorcios, amenazaron con retirarse de la puja si Fomento no accedía a rebajar el precio de salida o a modificar el plazo para la presentación de las ofertas. Por si fuera poco, solicitaban garantías para que las condiciones de la venta se mantuvieran ante un más que probable cambio de Gobierno.

«El plazo era suicida», dicen fuentes de los grupos interesados. Y es que el calendario previsto por Fomento - con el fin último de cerrar la operación en vísperas del 20-N- tan sólo daba un margen de mes y medio a los candidatos seleccionados para concretar su oferta económica. «Con un margen tan ajustado y con los problemas que tiene la banca, resulta imposible encontrar entidades financieras dispuestas a invertir en el proyecto.», aseveran.

Precisamente, el cierre del grifo del crédito en los mercados financieros fue la justificación utilizada por Aena para defender su decisión. En su comunicado, alegó que los consorcios que aspiraban a la adjudicación tenían «problemas de financiación», pero dos de los participantes negaron a este diario que ése fuera el motivo principal del aplazamiento.

«Lo que ha pasado es que el Ministerio sabía que el concurso podía quedar desierto o con muy pocos candidatos y se le ha hecho saber repetidamente en los últimos días», afirman en uno de ellos. «Si tardaban más en aplazarlo, íbamos a incurrir en muchos costes, han apurado al límite», dijeron en otro.

Se trataba de un concurso internacional en toda regla y habían mostrado interés inicialmente grupos extranjeros como el alemán Francfórt, el francés Aéroports de Paris o el hindú GMR además de las empresas españolas Ferrovial, Abertis, San José, Acciona o FCC. Pero los que aspiraran a gestionar Barajas tenían que reunir 3.700 millones antes del día 31 y, los interesados en El Prat, 1.600 millones. Dos cifras respetables para la actual situación del mercado, sin que hubiera garantías políticas en la adjudicación.

«La financiación era posible de conseguir, pero con el Partido Popular, que seguramente gobernará, criticando el concurso y con lo que está saliendo de la situación del ministro de Fomento, era difícil que hubiera candidatos, especialmente extranjeros», aseguraron a EL MUNDO en uno de los grupos aspirantes.

De hecho, las empresas admiten haber mantenido diversos contactos con el responsable popular de política económica, Cristóbal Montoro, para conocer sus planes en los aeropuertos en el caso de que su partido saliera victorioso de las urnas. Reconocen que las reuniones resultaron bastante «disuasorias», teniendo en cuenta que, como poco, el PP intentaría desmontar la operación para diseñarla con sus propios criterios.

«Más que de un aplazamiento de la privatización, ya podemos hablar de una cancelación», esgrimen algunos de los participantes.

Blanco está bajo sospecha ante las acusaciones del empresario Jorge Dorribo de que se presta a hacer gestiones a cambio de dinero, lo que el ministro niega rotundamente

P&R

FRANCISCO NÚÑEZ / Madrid

14/10/2011

Privatizaciones 'contables'

La improvisación ha sido el patrón del Gobierno en esta legislatura. Acuciado por Bruselas improvisó un ajuste fiscal para reducir el déficit y lo mismo ha hecho ahora pretendiendo vender las pocas 'joyas de la corona' que le queda al Estado para evitar la presión de los mercados. Aena es un nuevo fiasco.

¿Por qué tanta improvisación?

Con el forzado ajuste fiscal (recorte de la inversión pública y salarial a destiempo, y alza de impuestos) se cargó el débil crecimiento de la demanda interna y la economía camina ahora hacia la recesión. Y la falta de realismo le llevó a anunciar la privatización de parte de Loterías y Aena en plena crisis de liquidez con el riesgo añadido de venderlas mal.

¿Cuál era el objetivo?

Zapatero se sintió agobiado por la presión de los mercados sobre la deuda y temió que en España prendiera el fuego griego de la intervención. Salgado diseñó las privatizaciones con que conseguir liquidez en términos de caja, no en contabilidad nacional, para modificar el calendario de emisiones de deuda y de esta forma eludir a las agencia de rating. Y el déficit pasó a un segundo orden de prelación.

¿Cómo se iba a hacer?

Los ingresos previstos por ambas privatizaciones , unos 14.000 millones, no podrían ser utilizados para reducir el déficit en términos de contabilidad nacional (la que se envía a Bruselas). Pero sí podrían destinarse a cubrir las necesidades de financiación del déficit de caja. Con esta liquidez temporal se podría variar el calendario previsto de las emisiones de deuda que iban venciendo. De esta forma, se retrasaban esas emisiones y se evitaba tener que pagar más por la elevada prima de riesgo.

¿Qué pasará ahora sin esas privatizaciones?

La presión ha bajado porque la crisis de la deuda soberana ha dado paso a otra crisis que hay que resolver antes, la financiera. Las entidades financieras que iban a colocar el 30% de Loterías en la Bolsa, y ahora las empresas que podrían acudir a la compra de Aena, han hecho recapacitar al Gobierno. Pero lo que más le ha convencido al Gobierno para dar marcha atrás en este proceso es que Rubalcaba se podría encontrar en plena campaña electoral con que ambas operaciones no se cubrirían ante la falta de interés y de liquidez privada. O que, en el mejor de los casos, las empresas se iban a vender barato. Eso tiene difícil explicación ante el 20-N.

¿Qué va a ocurrir con el déficit?

Vuelve a ser la principal prioridad. Lo más curioso es que la no venta del 30% de Loterías beneficia a las cuentas públicas de este año ya que el Estado utilizará íntegramente los 3.000 millones de ingresos que aporta para intentar conseguir el objetivo de déficit. Aena tienen pérdidas por su plan de inversiones

Marcha atrás en dos operaciones

>1 de diciembre de 2010: José Luis Rodríguez Zapatero anuncia en el Congreso la privatización de los aeropuertos de Barajas y el Prat mediante un régimen concesional. Indica que la operación, sumada a la OPV de Loterías, proporcionará al Estado unos ingresos de unos 14.000 millones de euros.

>3 de diciembre de 2010: El Consejo de Ministros aprueba el marco legal para la modernización y la liberalización de los 47 aeropuertos que integran la red.

>19 de septiembre de 2011: Los responsables de la sociedad pública Loterías insisten en que la privatización seguirá adelante pese a las enormes dificultades del mercado financiero.

>23 de septiembre de 2011: El Consejo de Ministros aprueba la OPV de Loterías.

>28 de septiembre de 2011: Economía decide congelar la privatización de Loterías. Se justifica en la inestabilidad del mercado y la baja valoración de los inversores.

>29 de septiembre de 2011: Pese a la cancelación de la OPV de Loterías, Salgado reitera que la privatización de Aena no se va a retrasar.

>7 de octubre de 2011: Blanco asegura que la privatización de Aena «va a salir bien». Garantiza que el contrato se adjudicará el 17 de noviembre, según el calendario previsto.

>13 de octubre de 2011: El Gobierno decide aplazar tres meses el plazo de presentación de las ofertas por los aeropuertos de Barajas y El Prat

1 comentario:

  1. Estamos como estamos, por culpa de quien????, creo que está la cosa clara.

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