Patxi López: «Las puertas para ETA siguen cerradas»

NAIARA ORTIZ / Bilbao / El Mundo

Responde a Pedro J. Ramírez, que le había pedido «no entreabrirlas»

El lehendakari, Patxi López, hizo ayer, durante la celebración del XX aniversario de EL MUNDO del País Vasco, una clara declaración de intenciones sobre el delicado momento que atraviesa la lucha antiterrorista a propósito de la posibilidad de que la izquierda abertzale acuda a las próximas elecciones municipales. Al finalizar su intervención en el acto, aseguró que «las puertas para ETA siguen cerradas a cal y canto», pero añadió a continuación que, no obstante, «la democracia es una ciudad de puertas abiertas para todo el que quiera entrar». Eso sí, «asumiendo sus principios, valores, reglas, normas y comportamientos».

El lehendakari proclamó, además, que «cuantos más entren en la ciudad de la democracia» asumiendo esos principios, «mayor será el triunfo de los demócratas».

Era su respuesta a la petición que minutos antes le había hecho el director de EL MUNDO, Pedro J. Ramírez, que en su discurso recordó que «ETA está acabada porque la sociedad vasca le ha cerrado definitivamente la puerta, una puerta empujada por muchos brazos», y reclamó al lehendakari que «esa solidaridad no se agriete, que esa puerta no se entreabra, que esa presión no consienta resquicio, rendija o gatera alguna». «Mientras ése sea el empeño», añadió Pedro J. Ramírez, «siempre podrá contar con EL MUNDO del País Vasco, un periódico que continuará siendo fiel a estos primeros 20 años de leal, firme y dolorosa independencia».

Este intercambio dialéctico entre el periodista y el político protagonizó un acto que, por lo demás, estuvo marcado por la cordialidad entre los numerosos asistentes que quisieron celebrar los primeros 20 años de vida de la edición vasca de este periódico.

Patxi López dedicó la mayor parte de su intervención a poner en valor la labor que ha realizado EL MUNDO del País Vasco durante las dos últimas décadas como «altavoz de las verdades incómodas que, una vez descubiertas, ayudan a construir un mundo más libre y más ético», en su discurso con motivo de la celebración del XX aniversario de este periódico en Euskadi. EL MUNDO celebró ayer esta efeméride con una cena en el Museo Guggenheim de Bilbao, a la que asistieron más de 350 personalidades del mundo de la política, la economía, la cultura y el deporte vascos.

López se felicitó porque «poco a poco» la sociedad vasca está superando «la presión de los totalitarios» y recuperando para la democracia y la libertad espacios «que le habían sido vetados». Un logro que el lehendakari atribuyó también a los periodistas que han trabajado en este periódico durante los últimos 20 años, pese a las amenazas sufridas e incluso materializadas por ETA, con el asesinato del columnista de este diario José Luis López de Lacalle.

«Esto no es un logro de una o dos personas, sino una conquista colectiva de la sociedad en su conjunto y en la que han participado también, cómo no, EL MUNDO del País Vasco y sus trabajadores que, a través de sus páginas, han ido ejerciendo un valiente y entregado derecho a la información», afirmó.

López no dejó de lado las críticas hacia este periódico, que se ha granjeado numerosas enemistades en las filas del Partido Socialista por muchas de sus investigaciones periodísticas. «Cuando me pidieron, primero, escribir un artículo para el suplemento del XX aniversario de EL MUNDO del País Vasco y, después, intervenir en esta gala tuve la tentación de sacar el anecdotario de dos décadas de portadas con capacidad de atragantar desayunos, titulares espinosos, entrevistas a cara de perro o la moderación de algún Foro Nueva Economía reconvertido en tête a tête con el periódico», relató al principio de su intervención.

Unos desencuentros que López consideró normales durante 20 años y que quiso dejar a un lado para destacar que la fiesta de ayer reunió a dirigentes institucionales, empresarios, gentes de la cultura, representantes sociales, «unidos todos, en mayor o menor medida, por un vínculo hacia un periódico y unos periodistas que en este tiempo nos han informado, contextualizado, retratado y acompañado en el caminar colectivo de la sociedad vasca hacia el siglo XXI», recordó.

El lehendakari cerró la ronda de discursos que se encargó de abrir el director de EL MUNDO del País Vasco, Josean Izarra, que quiso dar las gracias «con mayúsculas» por la numerosa presencia en el acto para compartir «20 intensos años». Izarra se refirió a la apuesta por las nuevas tecnologías realizada por EL MUNDO con Orbyt, una apuesta a la que también contribuye su edición vasca. «El periodismo se multiplica en sus soportes y EL MUNDO del País Vasco ya ha hecho los deberes para empujar con fuerza en las ambiciosas apuestas del grupo Unidad Editorial», aseguró.

El director de EL MUNDO, Pedro J. Ramírez, recordó por su parte que los profesionales que trabajaron en el nacimiento del periódico en Euskadi «nos comprometimos a enriquecer el pluralismo de la sociedad vasca como una voz independiente, dispuesta a anteponer el derecho a la información a cualquier otra consideración, y 20 años después nadie podrá reprocharnos el no haberlo cumplido».

Las intervenciones se completaron con el discurso de la presidenta de Unidad Editorial, Carmen Iglesias, que aseguró que todos los periodistas que han trabajado en EL MUNDO del País Vasco son «un ejemplo, porque han resistido con riesgo y valentía, y con lucidez, frente al terrorismo, el terror y el riesgo».

El XX aniversario de EL MUNDO del País Vasco reunió a una nutrida representación de la clase política vasca. El Ejecutivo autonómico estuvo representado también por el consejero de Interior, Rodolfo Ares; el de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre; su homólogo en Industria y Turismo, Bernabé Unda; el titular de Vivienda, Obras Públicas y Transportes, Iñaki Arriola, y la portavoz y consejera de Justicia y Administración Pública, Idoia Mendia.

También quiso acompañar al periódico en esta fecha tan especial la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga; su homóloga en Juntas Generales de Guipúzcoa, Rafaela Romero, o el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti. En la fiesta estuvieron representados asimismo el mundo de la judicatura, de la empresa, de la cultura y del deporte.