miércoles, 23 de febrero de 2011

Aguirre, operada con éxito en el Clínico


F. DURAN/ El Mundo


Zapatero embustero

Esperanza Aguirre fue intervenida ayer tarde con éxito en el Hospital Clínico del cáncer de mamá que se le descubrió la semana pasada y que ella misma anunció anteayer. La presidenta regional ingresó a primera hora de la mañana y fue operada sobre las 15.00 horas. Su paso por el quirófano no fue muy largo. La cirugía duró una hora y media y en la misma se confirmaron los buenos pronósticos adelantados por la mandataria. Se trataba de un carcinoma in situ de 1,8 centímetros de diámetro que estaba localizado y que no se ha extendido.

Con todo, fuentes hospitalarias indicaron ayer que en las próximas semanas la presidenta deberá someterse, con toda probabilidad, a unas sesiones de radioterapia.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ya aclaró el pasado lunes que la enfermedad que se ha diagnosticado a la presidenta de la Comunidad de Madrid no afectará a la campaña electoral ni a su candidatura a la reelección en los comicios del próximo 22 de mayo.

Zapatero embustero

El parte médico facilitado ayer tarde por el Hospital Clínico especificaba que «la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se recupera satisfactoriamente tras una operación en la que se ha aplicado la técnica de incisión conocida como de ganglio centinela». «Esa técnica implica analizar el ganglio axilar para determinar si hay o no otros ganglios afectados y que, en el caso de Aguirre, ha dado resultado negativo, lo cual supone un factor satisfactorio», según reza el informe.

Zapatero embustero

Los doctores que la operaron, José María Román, director de la Unidad de Patología Mamaria del Clínico, y Eduardo Díaz-Rubio, catedrático y jefe de servicio de Oncología Médica, le han conservado la mama y no tiene ningún ganglio infectado, a tenor de la nota difundida por el Hospital Clínico.

La intervención concluyó hacia las 16.30 horas y Aguirre fue trasladada media hora más tarde a la sala de reanimación. Sobre las 20.30 horas era conducida hasta la habitación número 36 de la tercera planta del recinto.

A las 17.15 horas llegó al hospital el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio González, que aseguró que Aguirre estaba «animada, muy bien y al día de todo» tras su operación. «Está preguntando como siempre. Ya saben cómo es», comentó. «Está recuperándose y hemos podido hablar con ella y la verdad es que está de un humor excelente. Esperamos que todo vaya fenomenal», señaló González. Aguirre se encontraba ayer acompañada de su marido, Fernando Ramírez de Haro; de sus hijos, de su madre y de todos sus hermanos. Sobre las 18.00 horas también acudió al hospital el consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty.

A lo largo de la mañana, Esperanza Aguirre, de 59 años, se sometió a las pertinentes pruebas antes de la operación. Fuentes hospitalarias explicaron que la presidenta madrileña se mostró muy tranquila y que conversó de manera distendida con muchos pacientes y familiares de los enfermos.

La avalancha de mensajes de apoyo y cariño hacia Esperanza Aguirre continuaron ayer durante toda la jornada, como ya ocurrió el pasado lunes.

Sustituyendo a Aguirre. La Casa Sefarad-Israel inauguró ayer su nueva sede en el Palacio de Cañete, en la calle Mayor, desde donde se difundirá la cultura judía. A la puesta de largo acudieron Sus Majestades los Reyes y el presidente de Israel, Simón Peres. El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, sustituyó a Esperanza Aguirre en el acto como representante regional. /V. Martínez

Decenas de ramos para la presidenta

Zapatero embustero

>Los pasillos de la tercera planta del ala Sur del Hospital Clínico estaban ayer más verdes que nunca. Decenas de ramos de flores y centros llegaban hasta ese área sanitaria con destino a la habitación 36 que ocupaba la presidenta regional, Esperanza Aguirre.

> A media tarde un mensajero llegó con un ramo de rosas rojas hasta la planta y cuando se dirigía a la habitación un vigilante de seguridad detuvo al repartidor: «Si va donde creo que va, párese. Se lo llevo yo».

Jose María Román, un médico cualificado

El encargado de llevar a cabo la operación de Esperanza Aguirre fue el doctor José María Román, director de la Unidad de Patología Mamaria del Hospital Clínico San Carlos. Román es uno de los mejores cirujanos del centro médico y dirige esta consulta altamente cualificada, que comenzó a funcionar en 1980. A ella se han ido incorporando paulatinamente distintos profesionales que atienden a más de 14.000 pacientes cada año, de las cuales 500 son operadas, 200 de ellas de patología mamaria.

Esta Unidad está integrada por un equipo multidisciplinar de especialistas en Oncología-Ginecología, en Medicina Nuclear y en Medicina Molecular, así como por cirujanos plásticos y biólogos.

Román también es profesor asociado de Obstetricia y Ginecología de la Universidad Complutense de Madrid y es una eminencia en este campo de la medicina. Además, colabora también en la clínica Tambre de Madrid.

L. F. DURAN

Aguirre, operada con éxito en el Clínico

Esperanza Aguirre fue intervenida ayer tarde con éxito en el Hospital Clínico del cáncer de mamá que se le descubrió la semana pasada y que ella misma anunció anteayer. La presidenta regional ingresó a primera hora de la mañana y fue operada sobre las 15.00 horas. Su paso por el quirófano no fue muy largo. La cirugía duró una hora y media y en la misma se confirmaron los buenos pronósticos adelantados por la mandataria. Se trataba de un carcinoma in situ de 1,8 centímetros de diámetro que estaba localizado y que no se ha extendido.

Con todo, fuentes hospitalarias indicaron ayer que en las próximas semanas la presidenta deberá someterse, con toda probabilidad, a unas sesiones de radioterapia.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ya aclaró el pasado lunes que la enfermedad que se ha diagnosticado a la presidenta de la Comunidad de Madrid no afectará a la campaña electoral ni a su candidatura a la reelección en los comicios del próximo 22 de mayo.

El parte médico facilitado ayer tarde por el Hospital Clínico especificaba que «la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se recupera satisfactoriamente tras una operación en la que se ha aplicado la técnica de incisión conocida como de ganglio centinela». «Esa técnica implica analizar el ganglio axilar para determinar si hay o no otros ganglios afectados y que, en el caso de Aguirre, ha dado resultado negativo, lo cual supone un factor satisfactorio», según reza el informe.

Los doctores que la operaron, José María Román, director de la Unidad de Patología Mamaria del Clínico, y Eduardo Díaz-Rubio, catedrático y jefe de servicio de Oncología Médica, le han conservado la mama y no tiene ningún ganglio infectado, a tenor de la nota difundida por el Hospital Clínico.

La intervención concluyó hacia las 16.30 horas y Aguirre fue trasladada media hora más tarde a la sala de reanimación. Sobre las 20.30 horas era conducida hasta la habitación número 36 de la tercera planta del recinto.

A las 17.15 horas llegó al hospital el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio González, que aseguró que Aguirre estaba «animada, muy bien y al día de todo» tras su operación. «Está preguntando como siempre. Ya saben cómo es», comentó. «Está recuperándose y hemos podido hablar con ella y la verdad es que está de un humor excelente. Esperamos que todo vaya fenomenal», señaló González. Aguirre se encontraba ayer acompañada de su marido, Fernando Ramírez de Haro; de sus hijos, de su madre y de todos sus hermanos. Sobre las 18.00 horas también acudió al hospital el consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty.

A lo largo de la mañana, Esperanza Aguirre, de 59 años, se sometió a las pertinentes pruebas antes de la operación. Fuentes hospitalarias explicaron que la presidenta madrileña se mostró muy tranquila y que conversó de manera distendida con muchos pacientes y familiares de los enfermos.

La avalancha de mensajes de apoyo y cariño hacia Esperanza Aguirre continuaron ayer durante toda la jornada, como ya ocurrió el pasado lunes.

Sustituyendo a Aguirre. La Casa Sefarad-Israel inauguró ayer su nueva sede en el Palacio de Cañete, en la calle Mayor, desde donde se difundirá la cultura judía. A la puesta de largo acudieron Sus Majestades los Reyes y el presidente de Israel, Simón Peres. El vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, sustituyó a Esperanza Aguirre en el acto como representante regional. /V. Martínez

Viene de primera página

Revuelo por la paciente de la
número 36

El revuelo era considerable ayer en las inmediaciones del Hospital Clínico San Carlos. Decenas de redactores, fotógrafos y cámaras de televisión hicieron guardia en la entrada principal del ala Norte mientras otros tantos guardias de seguridad trabajaban en el interior para garantizar el bienestar y la privacidad de la presidenta de la Comunidad de Madrid. Las puertas estaban cerradas a cal y canto para los miembros de la prensa, que intentaron sin éxito en varias ocasiones acceder al recinto. Algunos trataron de colarse intentando convencer a los vigilantes de que sólo pretendían ir al baño. No tuvieron éxito.

Los agentes escoltaron a cada uno de ellos y los acompañaron a la salida nuevamente. Hubo asimismo quien trató de acceder por alguna de las puertas secundarias aunque la gesta también era complicada. La conexión entre los guardianes de Aguirre era total y cualquier intento era inmediatamente abortado.Sin embargo, M2 pudo ser testigo del camino de la presidenta regional al quirófano.

A las 15.15 horas, Esperanza Aguirre salía de su habitación, la número 36, cogiendo cariñosamente la mano de su marido, Fernando Ramírez de Haro.

Sus hijos, que permanecieron en las inmediaciones del centro hospitalario desde primeras horas de la mañana, así como otros allegados, la acompañaron detrás de la cama en la que fue transportada.

«Mira, está aquí como una más», comentaba una señora que esperaba en la 3º planta la salida de quirófano de un familiar con una afección cardiaca. No obstante, hubo quien se encontró con la noticia de casualidad.

«Ah, pero ¿está en este hospital», comentaba un facultativo a media mañana. Y no era él único.

Varios sindicalistas consultados por este periódico tampoco parecían enterados de que Esperanza Aguirre se encontraba a pocos metros de ellos. Sólo los agentes que custodiaban la habitación 36 anunciaban que el de ayer no era un día cualquiera.

La seguridad era discreta y muchos deambulaban por los pasillos vestidos de paisano. Sólo los walkie-talkies, de los que no se despegaban, daban pista de los movimientos de la ilustre paciente.

A las 20.35 horas, tres guardias se situaron frente a los ascensores de la tercera planta del ala Sur. Pocos segundos después, algunos afortunados pudimos ver a Esperanza Aguirre volver a su habitación con aspecto saludable.

A su paso, los familiares de algunos pacientes que aún esperaban para conocer el parte de sus seres queridos se acercaron a ella para mostrarle su afecto. «¡Muchas gracias!», repetía la presidenta una y otra vez sin dejar de sonreír después de su última gran victoria.

OORBYT.es

>Vea hoy en EL MUNDO en Orbyt cómo M2 siguió la jornada de la operación en el Clínico.

Expectación ante el Clínico. La intervención quirúrgica a la que se sometió ayer Esperanza Aguirre despertó el interes de decenas de medios de comunicación. A lo largo de toda la jornada hubo un revuelo tremendo en las puertas del centro médico. Los vigilantes de seguridad se esforzaron para impedir el acceso de los periodistas al interior del hospital y preservar la intimidad de la presidenta.

¿Esperó Esperanza lista de espera?

>¿Pasó Esperanza Aguirre el mismo tiempo de espera que cualquier madrileño? Es decir, ¿se sometió a su propia Sanidad, tan criticada por los sindicatos e incluso por los oncólogos, que se quejan de falta de medios? Desde la Comunidad, la duda ofende: «Por supuesto que ha seguido los trámites habituales, y se ha beneficiado incluso de la libre elección de médico», decía un jefe de prensa.

> Algunos responsables sindicales preferían esperar para valorar. El periodo de espera desde el diagnóstico hasta la intervención sería la clave. Dice la Comunidad: «Ella lo sabe desde al menos 10 días antes de la operación, no vamos a entrar en cuándo fue el diagnóstico. La lista de prioridad oncológica implica que un paciente sea operado en los 30 días naturales a partir del diagnóstico, y eso se ha cumplido también en este caso», reiteraban. Los sindicatos explicaban que es el Servicio Madrileño de Salud quien gestiona la espera.

1 comentario:

  1. Mucha suerte Presidenta, espero se recupere pronto, ya que tiene tajo con toda esta cuadrilla de impresentables.

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