jueves, 29 de julio de 2010

«La Guardia Civil está para multar, no para advertir», afirma Rubalcaba


C. U. / Madrid

La huelga de 'bolis caídos' en vísperas de la Operación Salida preocupa en Interior

Zapatero embusteroLa protesta de bolis caídos que mantienen agentes de Tráfico desde comienzos de julio tiene cada vez más nervioso al ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. En vísperas de la Operación salida de agosto, Rubalcaba advirtió a los agentes que su «obligación» es imponer multas si detectan cualquier infracción cometida por los conductores en las carreteras.

Si hace un mes el ministro del Interior aseguró que no le constaba ninguna protesta por parte de los agentes de Tráfico, ayer dio indicios de estar más preocupado y admitió que la Guardia Civil está «estudiando la situación».

«La Guardia Civil tiene que cumplir las leyes y cuando un ciudadano se salta un stop, la Guardia Civil le tiene que multar. No basta con decirle que eso no se hace», advirtió Rubalcaba.

Las demandas de los agentes tienen su origen en las diferencias salariales con otros cuerpos de seguridad como la Policía nacional o las autonómicas. Además, el malestar se ha acentuado con las medidas de austeridad presupuestaria impuestas en la Dirección General de Tráfico (DGT), que han reducido los ingresos que perciben y priman el ahorro en gasolina, dietas y horas extra a la hora de controlar la circulación en las carreteras. La respuesta de los agentes ha sido la de mirar para otro lado o reprender verbalmente a los conductores cuando les sorprenden cometiendo infracciones «leves», según ha señalado la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC).

Esta asociación difundió a comienzos de esta semana un baremo de puntos con el que se incentiva a los agentes. Según esta tabla, Tráfico prima la imposición de multas a conductores particulares y profesionales sobre otras intervenciones como el auxilio en carretera o la intervención en accidentes. «No vamos a recaudar los 430 millones de euros del año pasado. Se prima la recaudación sobre el servicio al ciudadano», señaló ayer un representante de la asociación. Según la AUGC, las protestas han provocado una caída del 90% en el número de sanciones que habitualmente imponen los agentes de Tráfico. Esta magnitud supondría 120.000 sanciones menos, extremo que negó la DGT.

Interior tuvo así que responder a a denuncias de afán recaudatorio procedentes de agentes de la Guardia Civil en vez de los conductores, como es habitual. Rubalcaba negó de forma tajante que su departamento esté preocupado por el descenso de la recaudación a consecuencia de esa hipotética huelga de bolis caídos y destacó que lo que de verdad importa al Gobierno es la mejora de la seguridad vial y no las multas de tráfico.

Por su parte, el director de Tráfico, Pere Navarro, reconoció las dificultades que atraviesa su departamento e instó a la Guardia Civil «a remar en la misma dirección». Navarro pidió a los conductores atención especial a la carretera en los próximos días y subrayó la necesidad de evitar el alcohol al volante, especialmente entre los más jóvenes. A ellos les recomendó designar un conductor alternativo como mejor manera para evitar problemas en las noches de fiesta.

1 comentario:

  1. Vaya pájaros, ahora dicen que no les interesa la recaudación, si no, que le interesa la mejora de la seguridad vial. Mienten como bellacos, osea como siempre, mentirosos compulsivos.

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