LUIS ÁNGEL SANZ / Madrid
Todo a cambio de que sus dos diputados en el Congreso voten a favor de los Presupuestos Generales del Estado de 2011 y eviten que Zapatero se vea obligado a convocar elecciones anticipadas el año próximo. CC se suma al PNV y ambos se convierten en los salvavidas del jefe del Ejecutivo en el momento más delicado de su vida política.
Ni Rivero, ni el PSOE, ni CC quisieron o supieron evaluar el coste total que tendrá el acuerdo para las arcas del Estado en un momento de grave crisis.
El portavoz parlamentario socialista, José Antonio Alonso, llegó a decir que «es imposible hacer un cálculo» de lo que supondrán todas las partidas afectadas. La portavoz de CC, Ana Oramas, sí explicó que hay partes «cuantificables» que ascienden a 289 millones de euros; y otras «no cuantificables» cuyo importe ambos dijeron desconocer.
Muchas de estas segundas partidas son aumentos de las bonificaciones actuales al transporte de viajeros, y ni el Ejecutivo de España, ni el de Canarias parecen tener una estimación de a cuánto ascenderán. Oramas se esforzó en recalcar que el pacto firmado «no es secreto; es absolutamente público» (a continuación se entregó a los periodistas). Y Rivero insistió por la mañana en que es «bueno para el país, para España, y bueno para Canarias».
Como mínimo, el pacto rubricado ayer supondrá un montante inicial de 300 millones de euros sólo en los Presupuestos de 2011. La mitad de ese dinero se destinará a tres planes de empleo específicos para Canarias, que es la región española con una tasa de paro más alta.
Pero, además, el compromiso firmado por el PSOE y CC incluye la transferencia de las políticas activas de empleo y las bonificaciones a la Seguridad Social en un traspaso que no fue cuantificado, pero que se gestionará «en las mismas condiciones» que lo hará el Gobierno vasco tras el acuerdo con el PNV. Alonso también insistió en que «no afectará a la caja única de la Seguridad Social».
Zapatero también aceptó la conversión de las aguas que separan las islas en «aguas canarias», en expresión de Rivero. Eso supondrá una mejora sustancial de la financiación de la comunidad gracias a que aumentará su territorio, y el control del Gobierno de las islas sobre, por ejemplo, las prospecciones petrolíferas que se pudieran hacer en la zona, o sobre el tráfico marítimo, siempre según sus competencias.
Además, el PSOE adquiere un compromiso para impulsar un nuevo Estatuto de Autonomía para Canarias que sea «de última generación», también en expresión de José Antonio Alonso, y para traspasar todas las competencias reconocidas en el Estatuto actual y pendientes de transferir a la comunidad.
El acuerdo se rubricó ayer entre los portavoces del PSOE y CC. Pero antes, lo hicieron oficial con una reunión de más de una hora en el palacio de La Moncloa José Luis Rodríguez Zapatero y Paulino Rivero. El mandatario autonómico se desplazó después al Ministerio de Política Territorial, donde repasó los aspectos técnicos con el vicepresidente tercero, Manuel Chaves.
PSOE y CC llevan cuatro meses negociando los pormenores de un pacto que no se reduce a los Presupuestos de 2011, sino que quiere ir más allá. Un acuerdo global que recoge la mayoría de las exigencias que CC había hecho bajo amenaza de «tumbar» los Presupuestos.
El texto dice que «los firmantes dotan al presente acuerdo de una proyección temporal que trasciende la estricta tramitación presupuestaria» porque «persigue garantizar la estabilidad política, institucional y económica que exige el interés general». La intención del PSOE es dotarse de un balón de oxígeno que dure hasta las elecciones generales de 2012. Eso sí, Rivero, no dejó tan claro como querría el PSOE que vaya a apoyar también los últimos presupuestos de este Gobierno, los de 2012, de los que «se hablará durante el desarrollo de lo pactado hoy», dijeron fuentes del Ejecutivo canario.
Que alegremente gastan el dinero, sin pensar en los demás, más que en ellos mismos, España les importa un pimiento....
ResponderEliminarNo nos merecemos un gobierno que nos mienta (palabras dichas por rubalcaba).