UGT y CCOO rompen el frente común de la izquierda sobre la huelga de Haidar

UGT y CCOO rompen el frente común de la izquierda sobre la huelga de Haidar

Parte de los grupos de apoyo a Aminatu Haidar, durante la lectura de una carta dirigida al Rey pidiendo su intervención (Efe).

@Alberto Mendoza.- 12/12/2009 06:00h

Los sindicatos UGT y CCOO han roto el frente común de la izquierda sobre la huelga de hambre de Aminatu Haidar al pedir a la activista que vuelva a comer. Hasta ahora, la Plataforma de Apoyo a Haidar y los artistas que la respaldan han respetado el deseo de la luchadora saharaui de permanecer en huelga de hambre, que se opone a ser alimentada incluso una vez que pierda el conocimiento. Sin embargo, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo remitieron el jueves una carta en la que le reclamaron “con un profundo respeto” que deje la huelga. Una propuesta que, de haber sido aceptada por la activista, habría rebajado notablemente la presión sobre el Gobierno.

Los líderes sindicales han figurado en primera línea en el movimiento de respaldo a Haidar. El mismo jueves participaron junto a Pedro Almodóvar, Aitana Sánchez-Gijón, Juan Diego o Fernando Colomo en un acto para exigir la intervención del Rey en la crisis. A los artistas que lideraron el “No a la Guerra” en 2003, como Willy Toledo o Juan Diego Botto, han sumado escritores como Günter Grass, Darío Fo, José Saramago, Carlos Fuentes, Mario Vargas Llosa o Eduardo Galeano. Asimismo, Izquierda Unida y diversas organizaciones se han comprometido con la causa de la activista Una voz única que los secretarios generales de CCOO y UGT quebraron con esta petición unilateral.

“Deseamos que en los próximos años puedas seguir representando los valores que hasta el momento has defendido”, afirmaban en la carta que enviaron a Haidar con motivo del Día Internacional de la Declaración de los Derechos Humanos. Méndez y Toxo justificaron su iniciativa como el “gesto de un nuevo triunfo” ante el pueblo saharaui y el resto del mundo que “quiere y desea celebrar” con ella el 10 de diciembre “de este año y en el futuro”.

“Tu vida es muy valiosa y tu presencia necesaria e imprescindible para seguir defendiendo la causa de los derechos humanos individuales y colectivos”, expresaron en la misiva, según informó Efe. De este modo, apelaron a “todos los trabajadores españoles” para reclamar “con un profundo respeto” el fin de la huelga de hambre. Toxo insistió ayer en que la luchadora saharaui ya ha logrado el efecto político y social para situar el conflicto del Sahara en el centro de la atención mundial, y que “ahora la necesitamos viva”.

Haidar hizo caso omiso de la recomendación de los sindicatos. Fernando Peraita, portavoz de la Plataforma de Apoyo, explicó a este periódico desde el aeropuerto de Lanzarote que “la huelga de hambre sólo se acabará cuando pueda llegar a su casa”. Peraita señaló que la activista se encuentra “físicamente muy cansada, pero con la mente muy fuerte”, por lo que continuará con su reivindicación a la espera de una solución diplomática. La Plataforma espera que las llamadas de la secretaria de Estado Hillary Clinton al Gobierno marroquí y la reunión del próximo lunes con Miguel Ángel Moratinos en Washington sean decisivas.

El Gobierno echa la culpa a la Policía

Mientras, el Gobierno volvió a ofrecer ayer una extraña versión sobre cómo pudo entrar Haidar a España pese a no tener pasaporte. El Ejecutivo aseguró que fue la Policía quien la permitió viajar, algo que tanto el entorno de la activista como los sindicatos policiales tachan de “mentira”. José Luis Rodríguez Zapatero rechazó cualquier responsabilidad desde Bruselas afirmando que “no hay ninguna autoridad política en el día a día dedicada a conceder o denegar una autorización, ya que eso corresponde a las autoridades administrativas”.

Sin embargo, la abogada de la activista señaló ayer que la policía no dejó pasar a su cliente hasta que “alguien dio la orden desde Madrid de darle la bienvenida a España”. “El Gobierno está mintiendo otra vez”, expresó Peraita, quien insistió en que los policías fueron obligados a dejar entrar a Haidar. Los sindicatos policiales rechazaron también la versión gubernamental, y aseguraron que “el Ejecutivo evitó una rápida solución al caso durante las primeras horas”.

Por su parte, la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega sostuvo tras el Consejo de Ministros que Haidar entró a España conforme a lo dispuesto en la ley, porque “tiene permiso de residencia legal por razones humanitarias”. La Ley de Extranjería prevé, en el “Capítulo I De la entrada y salida del territorio español”, que los extranjeros con tarjeta de identidad “no será exigible el visado”, aunque no exime de presentar el pasaporte.

Uno de los puntos de la norma permite autorizar la entrada a España de aquellos que no reúnan los requisitos establecidos “cuando existan razones excepcionales de índole humanitaria, interés público o cumplimiento de compromisos adquiridos por España”. No obstante, matiza que “en estos casos, se procederá a hacer entrega al extranjero de la documentación que se establezca reglamentariamente”. Pero la realidad es que Haidar nunca pidió abandonar El Aaiún, y continúa sin su documentación.