domingo, 27 de marzo de 2011

La radiación liberada en Fukushima podría dar la vuelta al mundo en dos o tres semanas


Alerta Digital

Desde hace décadas, la naciones tecnológicamente más avanzadas del planeta basaron su modelo social en principios puramente técnico-materiales, que no solo dejaron de lado a Dios, sino que, además, apartó a los hombres de Él con su orgullo de onmipotencia. Ese modelo importado dejó de lado las estructuras religiosas, morales y sociales que existían y ha introducido su mentalidad tecnicista en una catástrofe de proporciones apocalípticas.

El hombre creía poder transformar las piedras en pan, pero han terminado dando piedras en vez de pan. Es lo que ocurre cuando la primacía de Dios en las naciones deja de tener sentido. Se trata de reconocerlo como una realidad, una realidad sin la cual ninguna otra cosa puede ser buena. No se puede gobernar a las naciones con meras estructuras materiales, prescindiendo de Dios. Si el corazón del hombre no es bueno, ninguna otra cosa puede llegar a ser buena. Japón ha sido el último ejemplo.

El hombre debe tomar conciencia colectiva de que el proceso material en que está inmerso no está al servicio de los intereses superiores de la humanidad sino que es una consecuencia de determinados intereses los cuales no tienen para nada en cuenta las consecuencias que pueden generar en aspectos más profundos y vitales de la existencia. Las consecuencias nefastas del reciente desastre en la planta nuclear de Fukushima debe ser una señal de alarma urgente y replantear un nuevo modelo tecnológico.

En el mapa podemos que ilustra la información observar la cantidad de centrales atómicas en existencias, muchas construidas en zonas potencialmente peligrosas debido a la actividad sísmica. Por otro lado, no debemos descartar las más de 22000 armas nucleares diseminadas en todo el mundo.

La radiación liberada por la central nuclear de Fukushima-1, como consecuencia del terremoto que hace dos semanas sacudió el noreste de Japón, donde está ubicada, podría dar la vuelta al mundo en dos o tres semanas, según ha informado la Comisión Preparatoria del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares (CTBTO).

Apenas una semana después de que se produjera el terremoto, los niveles de radiación habían ascendido en California, en la costa oeste de Estados Unidos, y el pasado martes ya habían llegado partículas radiactivas a Islandia. Siguiendo este patrón, fuentes de la CTBTO citadas por Kiodo han indicado que en los próximos días la contaminación procedente de Fukushima llegará a los países europeos y que en un margen de entre dos y tres semanas habrá recorrido todo el globo.

El sábado 26, el Gobierno nipón amplía a 30 km la zona de riesgo por la elevada radiactividad. Las autoridades sospechan que el núcleo del reactor 3 se ha agrietado.

La Agencia Japonesa de Seguridad Nuclear ha detectado una tasa de yodo radiactivo 1.250 veces superior a la normal en una zona de mar a 330 metros al sur de la central de Fukushima 1, según informa la agencia Kyodo. El dato se añade al comunicado de la operadora de la planta, Tepco, que ha informado de que la fuga radiactiva detectada en el agua es mayor de lo esperado, lo que podría demorar la reanudación de las labores del enfriamiento, ya que el problema procede de la piscina de refrigeración. En conjunto, un nuevo revés en la crisis nuclear que vive Japón desde que el terremoto y el tsunami del pasado día 11 dañaron gravemente la central de Fukushima I .

1 comentario:

  1. Dentro de poco, todos calvos y calvas, y mientras quede solo en eso, vamos bien.
    Ya veremos haber si dicen o avisan de algo, porque el tema de las partículas de radiación que caen con la lluvia, eso trae cola, y aqui nadie dice nada.

    ResponderEliminar