Los españoles, divididos ante el chivatazo a ETA

FERNANDO LÁZARO / Madrid/ El Mundo

El 25,9% considera que Rubalcaba está implicado, frente a un 31% que lo exculpa

El caso arrancó el 4 de mayo de 2006 y aún tiene dividida a la opinión pública española. Y es que a pocos se les escapa lo difícil que es digerir como verdad absoluta que un puñado de agentes de la Policía Nacional, motu proprio, sin encomendarse a nadie, se pusieran de acuerdo y, en medio mitad del llamado proceso de paz, decidieran alertar a unos presuntos etarras que cobraban el impuesto revolucionario de que estaban siendo vigilados y de que iban a ser detenidos de manera inminente.

Porque, superado este estado, la coincidencia es que si finalmente se demuestra la implicación de agentes de la Policía es porque hubo un autor intelectual, es porque alguno con «muchos galones» dio la orden, es porque los superiores de los posibles condenados autorizaron la delación. Es decir, porque algún responsable político dio el pistoletazo para que el dueño del bar Faisán recibiera información privilegiada. De momento, en la cúspide de los imputados, el que fuera director general de la Policía, Víctor García Hidalgo.

Por esta posible responsabilidad política es por la que Sigma Dos pregunta a los españoles. Y la división es muy clara. La gran mayoría opta por el no sabe no contesta cuando se le pregunta si el vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba está implicado en el caso del chivatazo; más del 43% opta por el silencio. Las otras dos posiciones, divididas. Así, el 31% de los encuestados sostiene la inocencia del llamado a ser, según algunos dirigentes socialistas, el próximo cartel electoral del PSOE a las elecciones generales.

Esta semana, el juez que instruye el caso, Pablo Ruz, abrió una vía de investigación sobre el número dos de Rubalcaba, el secretario de Estado para la Seguridad, que cerró en apenas 48 horas. Y ese cierre envalentonó a Rubalcaba que, tras obviar que el que fuera su director de la Policía sigue imputado en la causa, exigió disculpas para los que dudaron de la honorabilidad de Antonio Camacho.

Más del 46% de los votantes del PSOE exculpan a su dirigente Rubalcaba de cualquier vínculo con este caso. Pero aún queda un 16% de estos electores socialistas que no se fían del vicepresidente y creen que sí está implicado en la causa. Por el contrario, los votantes del Partido Popular sí tienen más dudas sobre el responsable de la seguridad del Estado. Más del 45% sostiene que está implicado en el caso de la delación policial a los responsables de la trama de extorsión etarra, frente a un 16% que defiende su inocencia.

Pero donde más respaldo encuentra Rubalcaba es en las filas de los votantes de la coalición Izquierda Unida. Casi el 60% de los encuestados defiende a Rubalcaba y le desmarca por completo de este caso en el que el juez investiga delitos de revelación de secretos y de colaboración con banda armada. No llega al 15% la proporción de votantes de la coalición que no se cree la inocencia de Rubalcaba.

En cualquier caso, la gran mayoría de los españoles encuestados por Sigma Dos para EL MUNDO no tiene una posición definida sobre la actitud del vicepresidente del Ejecutivo en este que está siendo investigado en la Audiencia Nacional desde mayo de 2006.