ERENA CALVO / Rabat/ El Mundo
Especial para EL MUNDO
Según el también portavoz del Ejecutivo, Navarro se reunió con el ministro de Asuntos Exteriores alauí, Taieb Fassi Fihri, y el titular de Interior, Taieb Cherkaoui, se puso en contacto con su homólogo, Alfredo Pérez Rubalcaba. El rapapolvo del Gobierno marroquí llegó hasta la ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, según fuentes diplomáticas.
Naciri se quejó ayer en su declaración oficial de que algunos medios de comunicación españoles continúan con su deriva de desinformación sobre Marruecos. El ministro de la Comunicación expresó la «indignación» de su Ejecutivo por la difusión en el Canal 24 Horas de TVE de una información que apuntaba al posible movimiento de tropas de las Fuerzas Armadas Reales (FAR) implantadas en el Sáhara Occidental a ciudades como Casablanca o Rabat.
Un movimiento, que según algunos confidenciales, se habría producido en previsión de eventuales manifestaciones en Marruecos como contagio de las protestas sociales de algunos de sus vecinos como Túnez o Egipto.
Analistas políticos marroquíes han descartado en los últimos días que se pueda vivir una oleada de protestas en el Reino alauí, aunque algunos medios locales sí que han publicado que el Ministerio del Interior habría ordenado a las fuerzas policiales del país estar atentas a cualquier movimiento en este sentido. El Gobierno marroquí, además, se ha apresurado a informar de que se mantienen los precios de los alimentos y otros productos básicos.
El Gobierno marroquí, dijo Naciri, tacha de «falaces esas declaraciones infundadas» sobre el movimiento de tropas, que desmintió «categóricamente». Ese comportamiento, continuó, demuestra ser «poco profesional y carente de deontología»; con métodos de trabajo que cubren la actualidad de Marruecos, «con odio y mentiras como en el caso del desmantelamiento del campamento saharaui de Gdeim Izik», que se levantó a unos 15 kilómetros de El Aaiún (capital del Sáhara Occidental) como medida de protesta social.
Este desmentido llega con el rey Mohamed VI en París, según algunos confidenciales franceses.
Naciri recordó además que el pasado diciembre, el Parlamento marroquí pidió al Gobierno de Abbas El Fassi revisar las relaciones con España por una moción aprobada por el Congreso de los Diputados, en la que se calificaba de «violento» el desalojo del campamento saharaui. Al mismo tiempo, partidos políticos marroquíes y el Gobierno alauí condenaron «las mentiras» de algunos medios españoles al cubrir la información sobre el desmantelamiento y los posteriores disturbios que se vivieron en El Aaiún.
El moro tiene miedo, porque será??, cuando el hace lo mismo con sus súbditos. Si no, que se lo pregunten a los manifestantes de nador, que ya hace unos años, disolvió una manifa por la subida del pan con ametralladoras desde un helicóptero.
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