AGUSTÍN YANEL / Madrid/ El Mundo
De esta manera, y aun a costa de tener que rectificar su posición, los nacionalistas vascos y los canarios cumplieron el pacto que firmaron hace un mes con el PSOE, que se traduce en más inversiones del Estado en esas dos comunidades y en transferir al País Vasco 24 competencias que estaban pendientes desde hace años, a cambio de que esos partidos apoyen las cuentas públicas del Gobierno para 2011.
El diputado Gaspar Llamazares, en nombre de Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya Verds (IU-ICV), hizo un llamamiento a los diputados del PSOE para que reconsideraran su postura y votaran a favor de mantener el poder adquisitivo de los pensionistas. Les dijo que, de esta manera, al menos por una vez responderían no sólo «a las inquietudes de los mercados, sino a las de los ciudadanos».
No tuvo éxito en su propuesta porque, a la hora de votar, el PSOE contó con el apoyo de PNV y CC e impidió que prosperara esa enmienda: 170 diputados votaron a favor de no congelar las pensiones, pero 177 lo hicieron en contra, con lo que se mantiene la decisión del Gobierno de esa congelación.
Los socialistas han contado con el apoyo de los nacionalistas vascos y canarios en todas las votaciones durante los tres días de debate de los Presupuestos Generales del Estado, que concluyeron ayer en el Congreso. La gran mayoría de las miles de enmiendas debatidas fueron rechazadas, y varias decenas se aprobaron tras negociarlas el PSOE con otros grupos.
La enmienda de IU-ICV contra la congelación de las pensiones fue debatida y votada ayer porque el Gobierno se olvidó de vetarla para que no pasara al Pleno. El Ejecutivo puede impedir una de estas votaciones cuando supone una disminución de los ingresos o un incremento de los gastos previstos en los Presupuestos Generales.
Al PSOE le ha molestado que esa enmienda haya tenido que ser votada, según IU, porque ha obligado a sus socios del PNV y CC a retratarse y votar en contra de ella, a pesar de que con anterioridad habían sido contrarios a congelar las pensiones.
El PSOE había pactado con Llamazares que apoyaría una propuesta de IU-ICV para elevar a 511 euros anuales el complemento que perciben los pensionistas que no tienen un piso de su propiedad y viven de alquiler. Los socialistas, con el PNV y CC, impidieron que esa propuesta fuera aprobada.
El lunes último, en el boletín que el PSOE distribuye cada semana a los periodistas, ese partido destacaba que había sido capaz de pactar en la comisión de Presupuestos varias enmiendas con otros grupos, para que fueran aprobadas en el Pleno. Entre ellas citaba la referida a los pensionistas sin vivienda propia, que después no votó.
En IU consideran que el rechazo de los socialistas a esa propuesta, después de haber pactado antes que sí la apoyarían, se debe a «su malestar» porque se haya colado en el Pleno la enmienda sobre la congelación de las pensiones.
Una vez aprobadas algunas enmiendas y rechazadas la mayoría, los Presupuestos Generales del Estrado pasan ahora al Senado. De allí volverán al Congreso, que los aprobará definitivamente en la segunda quincena de diciembre.
El pacto del PNV con el PSOE se plasmó ayer, además de en esas votaciones, en la constitución de la comisión bilateral que va a estudiar las competencias pendientes de transferir al País Vasco.
Josu Erkoreka, portavoz del PNV en el Congreso, dijo que esa comisión va a trabajar «con rigor y seriedad, pero también con la máxima celeridad», para acordar un primer paquete de transferencias antes de que finalice 2010.
Que se podía esperar, pues esto.
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