MANUEL MARRACO / Madrid
El escrito, presentado el lunes por la abogada de la izquierda abertzale Jone Goirizelaia, va dirigido a la Sección Cuarta de lo Penal, responsable de celebrar el juicio por Bateragune, la plataforma de coordinación de la izquierda abertzale que Otegi y Rafael Díez Usabiaga pretendían poner en marcha para sustituir a Batasuna. Ambos están procesados por pertenencia a una organización terrorista, aunque el ex responsable de LAB logró la libertad hace seis meses para cuidar de su madre.
La Sección Cuarta ha dado traslado a la Fiscalía que dirige Javier Zaragoza para que se pronuncie sobre la petición. También deberá pronunciarse la asociación de víctimas Voces contra el Terrorismo, que ejerce la acusación popular.
En el año que lleva en prisión por Bateragune, Otegi ha reclamado su libertad en al menos otras tres ocasiones, todas sin éxito. La de ahora es la primera tras el alto el fuego y la única que menciona esa pretendida separación entre su discurso y el de la banda terrorista. Junto a Otegi, también han solicitado su libertad provisional con iguales argumentos los procesados Arkaitz Rodríguez Torres, Miren Zabaleta y la ex tesorera del PCTV Sonia Jacinto.Sigue en página 4
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La referencias de Otegi a la situación política se recogen en el último punto de su escrito, el que antecede a su petición de libertad. El apartado comienza diciendo que la prisión provisional en la causa de Bateragune había sido dictada basándose en unos «informes policiales que hablaban de una estrategia común y al servicio de ETA». A continuación, añade que «el devenir de los acontecimientos políticos ha desmentido la falsedad del argumento utilizado para la prisión».
Y para comprobar esa falsedad que alega indica que «no hay más que analizar lo que los medios de comunicación reflejan», en referencia a la entrevista publicada hace unos días en el diario El País. En ella se mostraba partidario de la vía política frente a la terrorista, aunque no condenaba de manera expresa la actuación de la banda armada a cuyo servicio, según la investigación que le mantiene preso, ha estado.
Además de la vía política, la petición de Otegi incide en la familiar, con la que Usabiaga logró la excarcelación pero que a él no le sirvió de nada. Otegi recuerda que sus argumentos sobre la salud de su padre que hace meses alegó eran ciertos y que la prueba es que acabó sufriendo un infarto grave. «Así pues, los cuidados que indicábamos que necesitaba en su momento son ahora más necesarios», dice. Entre las circunstancias familiares mencionadas anteriormente se encuentra que su hija ha necesitado apoyo psicológico para sobrellevar el encarcelamiento de su padre.
El argumento con el que Otegi abre su escrito es que lleva más de un año en prisión provisional, desde que fue arrestado en una sede del sindicato LAB en San Sebastián, el 13 de octubre de 2009. Ese tiempo transcurrido, y el hecho de que el sumario ya se haya concluido, le sirve para argumentar que no hay peligro de que pueda entorpecer la investigación. En cuanto al riesgo de fuga, esgrime un fuerte arraigo social y familiar, y recuerda que se puede mitigar con una fianza, comparecencias periódicas u otras medidas que estime el tribunal.
El hoy preso en la cárcel de Navalcarnero (Madrid) alega igualmente un supuesto trato discriminatorio respecto a otros dirigentes abertzales que sí han sido excarcelados. Otegi menciona los sumarios de Batasuna y ANV/PCTV, en los que la Audiencia aceptó dejar en libertad a Pernando Barrena y Karmelo Landa, entre otros. «No serían comprensibles resoluciones diferentes en supuestos iguales», dice.
La causa de Bateragune no es la única por la que Otegi está preso. Su detención en 2009 provocó que el tribunal que tenía en sus manos el sumario de Batasuna/herriko tabernas -del que deriva Bateragune- ordenara también su encarcelamiento por reiteración delictiva. Según fuentes jurídicas, Otegi no ha presentado una petición de libertad en esa causa, por lo cual, la que se le pueda conceder en Bateragune no sería efectiva hasta que llegase la de Batasuna.
A este, ni agua, es el peor de todos, y está bien donde está.
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