sábado, 7 de agosto de 2010
Herido leve un joven en la explosión de un piso causada por un cargador de mecheros
La víctima se quedó dormida con un cigarro encendido que prendió fuego al gas
FOCES
Un joven vigués resultó herido leve en una mano al explotar en su dormitorio una bombona de gas para recargar mecheros. La aparatosa deflagración arrancó la puerta de la habitación y el marco de la ventana, reventando los cristales que cayeron a la calle. Su madre, que dormía en otro dormitorio, resultó ilesa. El siniestro tuvo lugar sobre las 7 de la mañana de ayer en un 5º piso del número 98 de la céntrica Pi y Margall.
El joven, al parecer, se quedó dormido en la cama con un cigarrillo encendido. En la habitación se halló un cargador de mecheros que, probablemente, tenía alguna fisura y fue perdiendo gas, que se acumuló en el dormitorio y que dio paso a la deflagración con el fuego que prendió el pitillo. Una patrulla de la Policía Nacional fue la primera en llegar al lugar de los hechos, y tras las explicaciones facilitadas por el joven y su madre, un equipo de los Tedax y otro de la Policía Científica acudieron al lugar y se han hecho cargo de la investigación.
La habitación del joven "quedó destrozada" e incluso hubo un "conato de incendio en la cama, la papelera y la alfombra", explicaban fuentes de los bomberos de Vigo. Su madre aseguró que dormía cuando la despertó la explosión. "Oí un ruido enorme, me levanté y ya vi la puerta del dormitorio descolgada del marco. Él me llamaba y ya bajamos para llamar a la Policía", manifestaba todavía asustada por lo que pudo ocurrir.
El hecho de que el joven estuviera tendido en la cama y tapado por una manta le protegió del fuego y por eso sólo sufrió quemaduras leves en la mano, según informaron los bomberos. Los expertos sostienen que de haber estado sobre la cama, tendría afectada gran parte del cuerpo.
El ruido de la explosión y de los cristales rotos a causa de la onda expansiva despertó al vecindario. Uno de los residentes en el piso superior afirma que salió al balcón y vio salir humo de la vivienda de abajo, y los cristales tirados ya en la calle.
La Policía Nacional investiga ahora si en la habitación donde se produjo la explosión, además de la pequeña bombona de gas para mecheros había algún otro elemento que facilitara la deflagración, atribuida a un accidente doméstico.
Al tenerse conocimiento de la explosión, la Policía Nacional puso en marcha el protocolo especial previsto para estos casos y hasta el lugar se desplazaron, además de distintas unidades policiales especializadas, un equipo de bomberos de Balaídos formado por un vehículo con un mando, un conductor y cuatro efectivos, así como dos patrullas de la Policía Local para regular el tráfico. Un segundo camión de bomberos salió de Teis, si bien regresó a la base al ser avisado de que el retén de Balaídos tenía ya controlada la situación.
Eso suele ocurrir, son cosas que son imprevisibles, por eso hay que dejarlos en lugar seguro.
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