La Guardia Civil sitúa en Burgos el origen de la dinamita incautada

PESCA ILEGAL

El instituto armado pedirá ayuda al GNR luso para determinar cómo llega el explosivo desde Portugal hasta Galicia
La investigación reclama más medios porque está convencida de que hay más cartuchos en el puerto de Vigo
L. Penide / L. C. Saavedra PONTEVEDRA/VIGO/LA VOZ. 1/7/2010
La Guardia Civil ha situado en Burgos, y más concretamente en la planta que tiene allí la compañía Maxam, el origen de, si no toda, de buena parte de la dinamita que en días pasados se ha intervenido en el litoral pontevedrés. Pero a Galicia no habría llegado directamente, sino a través de Portugal. El instituto armado investiga ahora cómo se llega al final de ese hilo que arranca en la provincia burgalesa; esto es, descubrir «el circuito de distribución y cómo se ha distribuido, cómo se ha accedido a ella», confirmó ayer el subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Delfín Fernández.

En este marco se sitúa uno de los próximos movimientos que tiene previsto realizar la Guardia Civil. Se está estudiando la posibilidad de cursar una solicitud de colaboración a la policía portuguesa para que participe en el esclarecimiento de lo que ya empieza a asumirse como una red de tráfico de explosivos, que, al parecer, podría tener una de sus bases de operaciones en Portugal. Posiblemente, en algunos de los puertos lusos de la zona norteña, extremo aún sin confirmar. ? Según los indicios de que disponen los agentes, la dinamita, una vez adquirida legalmente en territorio nacional, acabaría en manos de la ramificación lusa del entramado para, posteriormente, entrar en Galicia.

En España, según fuentes de la investigación, el movimiento de explosivos fuera de sus escasos usos tasados, como la minería o las obras públicas de carreteras o del AVE, por ejemplo, es complejo. El uso de cada cartucho tiene que ser autorizado por cada subdelegación. Delfín Fernández precisó que «se está poniendo un especial cuidado en que la utilización de explosivos en nuestro país esté muy controlada y siempre autorizada».

En el caso concreto de Pontevedra, la Guardia Civil lleva a cabo controles sistemáticos del uso de la dinamita, una labor en la que los agentes se coordinan con el área de Industria de la Subdelegación.

A la vista de las peculiaridades del otro lado de la raya, los expertos encargados del caso han trazado una línea de trabajo que pone a Portugal en su punto de mira, sin descartar otras hipótesis que, por ahora, parecen más débiles.

Las pesquisas han llevado a la policía judicial a valorar la cooperación de la GNR (Guardia Nacional Republicana) portuguesa y otras unidades especializadas del país vecino. Aunque no se puede avanzar en qué elementos incidirá la GNR, no se descarta que se hagan búsquedas en puertos lusos para tratar de apuntalar la pista portuguesa.?

Obstáculos a las pesquisas

Uno de los aspectos que podría dificultar estas labores es la antigüedad de algunos de los cartuchos incautados. Fernández matizó que, probablemente, alguno de ellos puede venir «de tiempo atrás, porque, incluso, se observó que la fabricación de buena parte del material incautado era bastante antigua».

Además, la Guardia Civil, a la vista del estado del fondo del puerto de Vigo, podría solicitar la cooperación de la Autoridad Portuaria para que buzos más especializados que los del instituto armado rastreen el lecho. El hecho de que se hubiesen localizado otros 600 gramos de dinamita inoperativa ha hecho presuponer a la Guardia Civil que puede haber más cartuchos sumergidos. Según fuentes de la investigación, se está tratando de localizar medios materiales para poder extraer o trasladar hacia otra zona de la dársena de los cerqueros parte del fango y del lodo para poder realizar una búsqueda más exhaustiva.