lunes, 18 de abril de 2011

El homenaje a 'Gatza' abre una crisis entre PP y Gobierno vasco


Bilbao / El Mundo

Los populares preguntan por qué la Ertzaintza dejó que «personas que hace unos días decían rechazar la violencia corearan la puesta en libertad de terroristas»
Zapatero embusteroEl homenaje de este sábado al etarra José María Sagarduy, Gatza, provocó ayer una seria crisis entre el PP y el Gobierno vasco. Los populares pedirán la comparecencia del consejero de Interior, Rodolfo Ares, en el Parlamento vasco, para que explique por qué la Ertzaintza permitió que «personas que hace unos días decían rechazar la violencia y apadrinar el nacimiento de Sortu las vemos ahora coreando la puesta en libertad de terroristas, a los que homenajean debajo del balcón [de su casa] y brindando con champán». «Este tipo de cosas dicen muy poco de Sortu», la marca con la que la izquierda abertzale pretende presentarse a las próximas elecciones municipales, «y lo que hacen es acreditar lo que tiene de montaje, urdido por los de siempre [ETA y Batasuna] y carente del mínimo exigible en una democracia», agregó.
Se da la circunstancia de que la Consejería de Interior había prohibido este homenaje al preso más antiguo de ETA.
Sin embargo, y como publicó ayer este periódico, el acto pudo celebrarse y lo hizo entre gritos de «golpear hasta ganar» y «la lucha es el camino», y uno de los padrinos de Sortu, Tasio Erkizia, pactó con la Ertzaintza los términos del homenaje ilegal, que concluyó con el canto del Eusko Gudariak.

Las relaciones entre el PP y el Gobierno vasco -cuyo lehendakari, Patxi López, lo es gracias a los populares- no pasan por su mejor momento, y de ello dio fe el vicesecretario general de Comunicación del PP nacional. Esteban González Pons advirtió al PSOE de que tenga «cuidado» con «poner en peligro el pacto en el País Vasco acusando al PP de lo que no nos podemos acusar los grandes partidos uno a otro, porque ese pacto es lo mejor que hemos hecho los políticos españoles desde hace muchos años y mantenerlo es un deber políticamente sagrado».

El vicesecretario de Comunicación del PP volvió a pedir a ETA «solo una cosa, que deje las armas», y al Gobierno socialista le pidió dos: que ni «mienta» ni «se deje engañar por la banda terrorista ETA nunca más». Se refirió a la necesidad de que «no haya candidatos de ETA ni Batasuna en ninguna lista» de cara al 22-M. «Es urgente, es indispensable», destacó, y explicó que no importa «cómo lo hagan». «Se puede hacer impugnando todas las listas, se puede hacer impugnando genéricamente la coalición», dijo en referencia a la coalición Bildu.

«El Gobierno puede elegir el camino que prefiera, pero el resultado solo puede ser uno. No hay derecho a que ninguno de los que han colaborado o puedan haber colaborado en que maten a españoles y esté dispuesto a colaborar en el futuro cobre un sueldo público de concejal o de diputado foral».

Poco antes, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el lehendakari, Patxi López, habían calificado de «indecente que el PP diga que tenemos un pacto con ETA. No aceptamos lecciones de nadie, nadie va a decirnos cómo se defiende la libertad y la democracia en Euskadi porque lo hemos hecho siempre en primera línea y hemos sido amenazados, agredidos y asesinados», afirmó López.

Zapatero retrocedió aún más en el tiempo para recordar sus cuatro años de oposición frente a Aznar durante los que «jamás critiqué al Gobierno».

NAIARA ORTIZ / Durango (Vizcaya)

Zapatero arropa a Eguiguren

«Defenderemos a los socialistas que han luchado por la paz, Jesús, que lo sepas»

Zapatero embusteroLas últimas salidas de tono del presidente del Partido Socialista de Euskadi (PSE), Jesús Eguiguren, no parecen pasarle factura. Pese a que el Gobierno vasco tuvo que publicar el viernes una nota para dejar claro que no comparte su postura acerca del papel del PP en la consecución de la paz, ayer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se dirigió expresamente a él durante su intervención en la Fiesta de la Rosa de los socialistas vascos.

Rodríguez Zapatero respaldó la cuestionada labor que Jesús Eguiguren ha realizado durante años para acabar con el terrorismo y su confianza en que la apuesta por las vías políticas de la izquierda abertzale ilegalizada es irreversible. «Vamos a defender a todos los compañeros que han trabajado y están trabajando por la paz, Jesús, que lo sepas», afirmó.

Precisamente ayer, en una entrevista concedida al diario Público, Eguiguren no se limitaba a decir que «ETA ha aceptado el mandato de la izquierda abertzale de terminar con el terrorismo», sino que se lanzaba a afirmar que «la legalización de Sortu va bien», o que «interesa que Bildu esté en las elecciones porque es el modo de fortalecer a Batasuna».

El respaldo a la línea más optimista y polémica en torno al fin de ETA no impidió que José Luis Rodríguez Zapatero lanzara un contundente aviso a los radicales. Según él, los avances siguen sin ser suficientes.

Aviso a los radicales

«Han dado pasos pero tienen que dar más pasos decididos y firmes para rechazar, olvidar y alejarse definitivamente de la violencia y ser partícipes de la democracia. Cuatro meses no bastan para convencer después de cuarenta años de violencia de ETA», afirmó el presidente del Gobierno con rotundidad.

Si a la izquierda abertzale le reclamó pasos, a ETA le exigió que dé sólo uno «atrás»: la «renuncia a la violencia para siempre, de forma definitiva y sin condición alguna».

Y no sólo le lanzó una exigencia, sino también una advertencia. «ETA debe saber que no paramos ni un solo día. No les vamos a dejar respirar para que no cojan aire. Más les vale que den un paso atrás y definitivo».

El acto celebrado ayer en Durango tuvo un claro sabor a despedida. Los socialistas vascos quisieron demostrar su agradecimiento al presidente del Gobierno por volver a estar con ellos en su fiesta tras la cancelación a última hora de la del pasado año, y, sobre todo, porque «eres el presidente que más ha hecho y ha arriesgado por la libertad. No sólo te lo debemos los socialistas sino todos los vascos decentes, porque ahora podemos respirar más tranquilos», afirmó el lehendakari, Patxi López.

Zapatero agradeció las «cariñosas» palabras del líder vasco y le auguró un prometedor futuro. «Es el lehendakari de la cordialidad y va a ser el lehendakari de la paz. La gran tarea histórica de ver el final de la violencia va a ser fruto, en gran medida, de la tarea que vosotros habéis hecho. Merece tanto la pena que los esfuerzos y sacrificios son pequeños. Patxi, desde que eres lehendakari todo está mucho mejor. El PSOE cada vez tiene más votos y ETA, menos adeptos, y si hay más fuerza del PSE y menos ETA es que el futuro de Euskadi es un futuro esperanzador. Eso quiere decir que con Patxi lo mejor para Euskadi está por venir».

El ex presidente del Gobierno José María Aznar estuvo muy presente en el discurso de Zapatero. La culpa fue de las palabras que Aznar pronunció en la Universidad de Columbia sobre la participación de España en a misión de la OTAN en Libia. «Como ex presidente tiene que tener respeto por lo que el Parlamento de España ha decidido soberanamente. Me da igual qué amigos tenga pero por favor, que cuando esté fuera de España, hable bien de España», reclamó el líder socialista.

José Luis Rodríguez Zapatero se ofreció a los socialistas vascos para seguir trabajando por la consecución de la paz, incluso después de concluir su mandato. «Es una tarea que hace historia y país. Siempre podréis contar conmigo, incluso después de abandonar mis tareas como presidente del Gobierno», anunció el líder del PSOE.

M. MARRACO / Á. ESCRIVÁ / Madrid

ETA designó a siete personas para otra negociación con el Gobierno

Entre ellos estaban Miren Zabaleta, de la confianza de Otegi, y Díez Usabiaga
ETA designó a siete personas para formar parte del «grupo de interlocución» con el Gobierno en una futura negociación. Los elegidos cumplían los requisitos de representar «a toda la izquierda abertzale» y actuar bajo «el principio de lealtad política con la Organización».

Éste mencionó a sus elegidos por sus alias: Onddi, Itzilo, Eneko, Anna, Guatxon, Argi y Aguzkine. Las Fuerzas de Seguridad dicen que se trataría de «personas encuadradas en los órganos de dirección de la izquierda abertzale, incluidos Bateragune, Ekin y Batasuna».

De hecho, en los documentos que han sido aportados en los últimos días por la Policía Judicial al juez que instruye el caso Bateragune, se aporta la cita en la que ETA realiza esa exigencia de lealtad y se adjunta una carta que demostraría que el apodo de Argi corresponde a Miren Zabaleta, una de las mujeres de confianza de Arnaldo Otegi y de Rafael Diez Usabiaga, detenida junto a ellos en octubre de 2009 por formar parte del proyecto Bateragune de revitalización de la izquierda abertzale a las órdenes de la banda terrorista.

Esos interlocutores para un nuevo proceso de paz «representarían a toda la izquierda abertzale y [el grupo] se formará en el principio de lealtad política con la Organización. Habrá un grupo de interlocución (5-6 personas) y de ésos se determinará los públicos y el portavoz. Estos miembros participarán en el centro de la dirección estratégica. Propuesta de la organización: Onddi, Itzilo, Eneko, Anna, Guatxon, Argi, Eguzkine». Así consta en uno de los documentos intervenidos en la operación contra Halboka, la estructura etarra encargada de controlar a los presos.

Uno de los documentos, que estaba escondido en el secador de manos del despacho de dos de los abogados detenidos, es una carta que demostraría el fuerte vínculo de Argi con la organización. En el escrito, ETA le reclama un «informe de detención», como al resto de sus miembros, para saber qué cosas ha contado a las Fuerzas de Seguridad. Además, le reprocha que tuviera en su poder el denominado Prodem (Proceso Democrático), el documento que detalla la estrategia de ETA.

«No sabemos si has enviado el informe de tu detención; nosotros no lo hemos recibido por el momento. Por tanto, el objetivo de esta nota consiste en aclarar algunas cosas. Por una parte, hemos podido leer en algunos medios de comunicación que en el registro de tu casa, el enemigo ha encontrado una copia impresa en papel de Comunicación General 0906. Te queremos preguntar si es correcto y, de ser correcto, cómo es posible que tuvieras impreso un escrito de ese tipo en tu casa. Comprenderás la gravedad de esto. A decir verdad, nos sorprende no haber recibido ninguna explicación al respecto», reclamaba la banda.

Pero no acaban ahí los reproches: «Por otra parte, hemos sabido que has informado a algunos militantes acerca de la situación de la izquierda abertzale y de la crisis vivida en la organización, junto con algunas opiniones tuyas sobre ésta. Queremos saber si esto es así y en qué términos, en función de qué y por qué se ha producido la transmisión».

El documento que le fue intervenido a Miren Zabaleta fue escrito en 2009 y difundido por la organización entre sus bases hasta al menos el pasado mes de junio, a pesar de que la izquierda abertzale aseguraba entonces que le había ganado el pulso a la organización.

En ese texto, publicado por este periódico en agosto de 2010, la organización explicaba que el Proceso Democrático es un proceso de diálogo «progresivo, reglamentado y acordado para llevar a Euskal Herria al escenario de la autodeterminación. Su fin es abastecer a nuestro pueblo del mecanismo jurídico político para pasar de la situación de opresión a una situación de reconocimiento». La banda terrorista dejó la instrucción de que el denominado Proceso Democrático (permanentemente reivindicado por la izquierda abertzale actualmente), debía ser «lo más público posible».

Y todo ello lo hacía compatible con sus atentados o con la capacidad disuasoria de su presencia.

«La disuasión y reactivación del papel de la lucha armada en el ámbito entre ETA y el Estado debe estar abierta como posibilidad política potencial...como activo para condicionar la práctica del enemigo y la tendencia a desviar el proceso», señaló a este respecto. Y añadió: «ETA se debe entender como garante activo del proceso de facto. En ese caso, actuará con la carta de disuasión de la ruptura militar del proceso».

ETA, en aquellos momentos, no quería volver a la negociación del PSOE «de Zapatero y Eguiguren» porque considera que incumplieron y no hicieron ningún esfuerzo. Así que señala que los negociadores «no podrán ser policías o jefes de policía (ministro del Interior). No tiene por qué haber navarros o vascongados, sí en otro ámbito. ETA no acepta a los representantes del último intento».

Respecto a la interlocución de la izquierda abertzale, la banda diferenciaba entre «las relaciones políticas y el ámbito de negociación». «Batasuna debe llevar a cabo las relaciones corrientes y una representación de Batasuna las llevará a cabo», señalaba, y es aquí donde designaba al grupo de interlocución de «cinco o seis personas como representación del Movimiento de Liberación Nacional Vasca».

En los meses anteriores tenía planeada una campaña de «acciones lo más duras posibles» (atentados) y «llenar el cerdito» extorsionando a los empresarios.

Después vendría la Declaración de Alsasua, la Declaración de Guernica y el rechazo de la violencia de ETA. Aunque persiste la reivindicación del Proceso Democrático, no se ha pedido la disolución de la organización y se ha seguido reivindicando la estrategia de ETA consistente en asesinar a casi 900 personas.

La banda niega en su último boletín interno que quisiera atentar contra Patxi López y Rodolfo Ares en junio de 2010- como publica hoy el diario Gara- así como que el atentado se frustrara debido a que el fusil que se iba a usar no llegó a tiempo.

1 comentario:

  1. Desde el 11-M, llevan negociando, que si tira y afloja, y hasta hoy en día. Todo esto estaba premeditado, con poner muertos encima de la mesa, para forzar al gobierno a negociar.
    Espero que sus conciencias les pasen factura.
    No nos merecemos un gobierno que nos mienta (palabras dichas por rubalcaba).

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