JUANFER FERNÁNDEZ / Pamplona
En una rueda de prensa en la que los convocantes se negaron a responder las preguntas de la prensa, los herederos de Batasuna abogaron por conformar un «sujeto electoral» que garantice un cambio político en la comunidad navarra. Tal cambio, adujeron, vendría propiciado por la «la adhesión social que pueda generar» el pacto.
Kiroga, en euskara, y Pueyo, en castellano, expusieron que la oferta de la izquierda abertzale pretende que la hipotética coalición integre el «acuerdo para un escenario de paz» presentado en Gernika. En el escrito -rubricado por Batasuna, EA, Aralar y Alternatiba-, los firmantes instaron a ETA a declarar un alto el fuego «permanente, unilateral y verificable» que evidenciase «un definitivo abandono» de la actividad armada.
Las próximas elecciones forales «pueden y deben convertirse en un primer paso» para afianzar «todos los proyectos políticos [...], sin injerencias externas», recalcaron ayer los portavoces, en referencia a la Ley de Partidos.
Eusko Alkartasuna y Aralar forman, junto al PNV y un grupo de independientes, la coalición electoral Nafarroa Bai, que recientemente se vio abandonada por la formación vasquista Batzarre, muy crítica con la actitud de Aralar a la hora de dominar los designios de Na-Bai.
La proposición de alianza de Batasuna, que obvia al PNV, toca la puerta de dos fuerzas políticas de importante calado en Navarra. Sin embargo, el primer escollo con el que la izquierda abertzale podría toparse es Nafarroa Bai, señalada por las encuestas como segunda fuerza política para las elecciones navarras.
Na-Bai puede convertirse en el caballo de batalla que impida consensuar la alianza. En el País Vasco, no obstante, el horizonte de un posible pacto no albergaría tantos obstáculos. Desde que el pasado 20 de julio EA firmara con Batasuna un acuerdo político-estratégico en el Palacio Euskalduna, su líder, Pello Urizar, ha evidenciado en numerosas ocasiones la sintonía de EA con la izquierda abertzale ilegalizada.
Los postulados electorales de Aralar en el País Vasco, en cambio, parecen no ir en la misma línea. La formación abertzale moderada, además, presentará hoy a algunos de sus candidatos en San Sebastián, obstaculizando así hipotéticos acuerdos.
Pueyo y Kiroga, por su parte, colocaron ayer la pelota en tejado ajeno, instando a EA y Aralar a secundar el pacto electoral en Navarra. Las dos formaciones, sin embargo, decidieron ayer no manifestarse al respecto.
El presidente de EA en Navarra, Maiorga Ramírez, anunció ayer a este periódico que, de momento, su formación no emitirá ninguna valoración sobre la propuesta de Batasuna. El coordinador general de Aralar y candidato propuesto por la formación para encabezar la lista de Na-Bai a las elecciones forales de Navarra, Patxi Zabaleta, también optó por guardar silencio.
Zabaleta, no obstante, recalcó a EL MUNDO que Aralar ya conocía la pretensión de la izquierda abertzale ilegalizada. «Mañana o pasado emitiremos una valoración», apuntó; pero «ya tenemos Na-Bai», argumentó. Las primeras reacciones al anuncio abertzale se producirán, previsiblemente, a lo largo de la jornada de hoy.
Ya a comenzado el baile, y el que no lo haga, se comerá una rosca....
ResponderEliminarHaber que hacen estos avispados del gobierno, tanto rajar y seguro que no hacen nada, pondrán una excusa y ya está.